¿Te lamentas de algo? ¿De qué te lamentas? ¿Por qué te lamentas? Nunca (que recuerde) había pensado sobre mis lamentaciones, hasta que el pasado diciembre llegué al Muro de las Lamentaciones en Jerusalén. Entonces pensé y encontré dos de esas lamentaciones.
Y además encontré esto:
Nuestro subconsciente siempre anda buscando excusas, lamentaciones, limitaciones, juicios de valor, guerras internas o alguien a quien culpar. Hacerlo nos da confianza y una cierta paz mental (falso).
Increíblemente, muy a menudo, buscamos lamentaciones, juicios, excusas o culpas antes incluso de que ocurran. Suena a algo así como: “no aproveché la oportunidad”, “nadie me ha ayudado, he estado solo” o “si no me hubiera tratado así…”.
Entonces, cuando los eventos ocurren (o no) continuamos añadiendo más lamentaciones, más excusas y más culpa. A veces cuando fallamos, fallamos porque nos hemos entrenado de antemano para ello.
Lamentarse es lamentable
Las personas que vienen con ese equipaje de lamentaciones, excusas y culpas a la espalda (“soy el hermano pequeño”, “si lo hubiera sabido antes”, “es culpa del horóscopo”, “no tuve un mentor”, “mi padre no me quería”…) a menudo fallan porque tienen todos esos venenos ya preparados. Así que es fácil retroceder cuando hay que arriesgar.
Aquí hay una alternativa para esos conducidos por las lamentaciones: ¿qué pasaría si lamentándote una sola vez te exculpara de todo y para siempre por siempre jamás? Otra para los que viven excusándose: ¿qué pasaría si te enfrentaras cada día a lo opuesto de la excusa que planteas? Y otra para los que se culpan en cada momento: ¿qué pasaría si la culpa fuera solo tuya por culparte todo el tiempo por algo que podrías evitar ahora mismo?
En lugar de buscar todos estos “venenos” (y los que me dejo; auto-limitación, quejas, etc), la oportunidad está en obsesionarte con lo contrario. Si trabajas sin descanso para evitar las oportunidades de usar tu habilidad para lamentarte, culpar y excusarte, nunca más necesitarás juzgarte, ni a ti ni a nadie.
Pd. Mis dos lamentaciones: uno, no haber podido evitar la muerte de una de las personas mas importante de mi vida (una estupidez, nadie puede evitar esto, lo sé). Dos, haber sido mi peor enemigo.
Atribución imagen: Bass nroll.