Empezar a sobresalir, vaya tema. Llevo tratando de sobresalir desde que tengo uso de razón, la cuestión es empecé a conseguirlo, muy lentamente (matiz esencial) cuando tenía 25 años. A partir de ahí fui progresando a un ritmo muy bajo, pero fui progresando. No fue hasta los 30 años donde el ritmo empezó a aumentar de forma cuántica más que exponencial. Todos los años que vienen por detrás, historia de acomplejado que siempre iba por detrás en cualquier cosa. Historia de decepciones propias y con el mundo, descanto, falta de confianza, poca convicción, trabajo duro que no daba resultados (aparentes), ir saltando de trabajo en trabajo, ir probando, intentando, hacer las cosas sin pensar, pero hacerlas.

Empezar a sobresalir: una historia

¿Sabes? Esos años, esas experiencias y todo lo que me dejó durante mi niñez, adolescencia y ya un poco más mayor, fue la base más sólida que jamás pude construir desde donde yo mismo lanzarme y sobresalir, de mí mismo y del resto, aunque esto último no fue necesario. Cuando giró la vista atrás guardó un regocijo especial por cada vivencia que he vivido, esencialmente por aquellas que más me han marcado. He construido lo que he construido basándonos en todo lo que supuso una limitación, impedimento, falta de recursos, frustración, miedo y dolor. Primero como mecanismo de defensa y supervivencia, sin saber muy bien lo que estaba haciendo. Luego, años después, sabiendo exactamente que eso era lo que me había traído hasta aquí.

Sobresalir no sucede por accidente. No todos lo consiguen, pero todos podrían hacerlo. Solo que toma instinto, perspicacia, insolencia, trabajo implacable, una autodisciplina sobrecogedora y una iniciativa desmesurada. Yo, me he llevado por delante absolutamente todo lo que he tenido que arrasar, si así lo he considerado y sentido. No he titubeado. No he dudado. He acometido. Sin embargo, nunca he hecho nada que fuera contra mis principios de vida y valores como ser humano. Como he repetido en alguna ocasión, sin estas dos cosas, solo somos un trozo de carne, un puñado de huesos y algunos kilos de piel viva.

Hoy, sobresalir es una forma de vida para miles de personas. Desde todas las personas que acuden a Stand OUT Program, hasta las que pasan por Inconformistas, trabajan en IG, asisten a mis cada más pocas conferencias, compran cada uno de mis libros, leen este blog, ven mis series web o escuchan Distupt Evertything podcast. Es parte de mi trabajo, y misión en vida, seguir sobresaliendo, no solo yo, sino invitar, presionar y alentar a otras personas a que lo hagan, a diario. Sin importar nada más que jodidamenre sobresalir de uno mismo.

A partir de aquí, es cosa tuya vaciarte y darlo todo. Yo, desde luego, no lo haré por ti.

La pregunta del podcast: ¿qué utilizarías como indicador para decir si sobresaliste de ti mismo/a o no?