¿Cuál es el alma del negocio en el que trabajas o diriges? ¿Que reside en el centro de lo que estás haciendo? ¿Cuál es el ecosistema que rodea a tu negocio?
Planificando el resto de 2017 y el 2018 que viene, nos formulamos estas preguntas. En IG hemos ayudado a empresas a usar los métodos que la transformación digital, el marketing y social media marketing conllevan para alcanzar objetivos.
El alma del negocio
¿Qué ayuda presta tu empresa? ¿Te levantas pensando «cómo puedo hacer algo que mejore la experiencia de mis clientes»? ¿Qué haces casi a diario para elevar la excelencia de tu trabajo? ¿Cuál es la razón por la que haces lo que haces aparte del dinero? ¿Te echará de menos la gente el día que no estés?
Los negocios no necesitan un alma. Sin embargo, cada empresa, cada profesional cada autónomo, cada trabajador, debería poseer una motivación (fuera de la monetaria) por lo que están haciendo. El propósito de cualquier negocio es ingreso y benéfico. De lo contrario no es un negocio en realidad. Es una búsqueda, un hobby, una pasión, una ONG o algo que no es una empresa. Sin embargo, buscar ingresos monetarios no significa tener un alma.
Si buscas trabajar sin descanso, pero no concibes lo que haces como trabajo por el disfrute y alegría que va con ello. Y además buscas construir un negocio que te sostenga (a ti y a otros), entonces poseer alma es de gran ayuda. El alma es la «vida» y guía moral e intencional de tu trabajo o empresa. Es la autenticidad que viene en ese ADN.
¿Qué necesitas considerar para poseer ese alma?
En Human Media se explica con ejemplos y experiencia que hay una manera poderosa y humana de conducir negocios y personas a través de Internet. Las personas. Al final del libro puedes comprobar que esto no aplica solo a las redes sociales. Esta es la clave: la mejor forma para sobresalir como negocio es evolucionar a algo más humano. Esto se ha ido perdiendo durante los años. Eso mismo ha pasado con estos elementos:
- Honor.
- Dignidad.
- Virtud.
- Apreciación.
- Alma.
Todo ello ha contribuido a los problemas económicos que tuvimos en los pasados años. De los cuales todavía nos resentimos. Crisis de valores humanos.
Parte de la cura es poner tus intenciones, morales, ética, valores y autenticidad de vuelta en la forma de negocios. Es por eso la importancia de permanecer humanos. Ser honestos en la estrategia, excelentes en la ejecución y humanos en la conexión.
Tu alma en el trabajo
El alma de tu negocio es un set de preguntas. Pregúntate a ti mismo si:
- Te gustaría que tu mejor amiga, pareja o madre fuera «marketeada» en la forma que tú haces marketing.
- Los productos que estás vendiendo se los venderías a tu familia.
- Hay mejores / más fáciles / más útiles formas de hacer lo que haces.
- El servicio que prestas realmente ayuda al que lo recibe a ser mejor profesional o persona.
- Buscas relaciones de negocios «ganar – ganar» o no.
- El tipo de precio que realmente merece la pena cada uno de tus productos o servicios.
- Estás vendiendo para subsistir o por entregar valor y cambio real.
Las respuestas a estas preguntas debería guiarte hacia el alma del negocio. Formarán el núcleo de la visión del alma del negocio. ¿Deberías poseer alma? No lo sé, dímelo tú.
La razón por la cual escribí Human Media era porque descubrí que hay más valor aparte del dinero y el tiempo, y permanecer humanos es una de esas grandes filosofías que ha acompañado a mis negocios y a mí mismo.
Resumiendo ¿Tiene alma tu negocio?
Si trabajas en ello de forma constante, te llevará al lugar que deseas, si lo ejecutas con excelencia y humanidad.
Atribución imagen: FBS.