Para mí es fácil, amo escribir, amo escribir aquí, en mi blog. Amo escribir para mí primero y luego para ti, sí lo sé, es egoísta, pero es mi realidad. No podría mentirte. Necesito y quiero ser honesto contigo.
Mi blog no es el más visitado de la blogosfera, eso está fuera de toda duda, pero siempre ha permanecido fiel a mis valores y principios. Es mi evolución con el paso de los años. Cuando escribo sobre lo que me preocupa, lo que me inquieta, las cosas que me incomodan o no entiendo. Escribo sobre mis experiencias vitales y profesionales. Sobre mis romance con los experimentos, mi obsesión con el alto rendimiento y la disrupción. Escribo sobre mi respeto por la excelencia y mi admiración por el cambio, el liderazgo y las personas. Reflejo mi profesión con el marketing, transformación digital, comunicación y potenciar negocios. Escribo porque cada día que escribo mejoro, crezco y me cuestiono a mí mismo, al mismo tiempo que me reafirmo y permanezco en mi esencia.
No recuerdo la última vez que caí en la trampa de escribir artículos / títulos para generar actividad en social media. Después de todo, compartir, likes, comentarios, retweets y «popularidad digital» son los indicadores que parecen indicar si un artículo es bueno o no ¿Seguro? Hasta cierto punto, quizás. Sin embargo, los retweets no equivalen a una recomendación.
¿Debería ser el propósito de escribir en un blog generar likes y tweets o crear confianza, resonar con tu público objetivo y generar oportunidades de negocio para ambas partes? ¿Debería ser solo para construir comunidad o para desarrollarte como persona y profesional?
Amo escribir
En ocasiones, vamos tan rápido, que ni siquiera nos hemos dado cuenta de que hemos perdido el rumbo. En mi caso, lo he perdido varias veces, he tenido que retroceder y pensar porque hacía lo que estaba haciendo. He encontrado el propósito y lo he perdido varias veces, hasta que llega un día en que sientes que algo en lo más profundo ha conectado, cuando sabes que esa es la razón. Sé cuál es la razón de este blog y es reflejar la colisión (positiva y no tanto) entre mi interior y mi exterior (tanto si gusta como si no), mientras vivo una vida intensa, rápida, obsesiva, consciente y plena. Y hacerlo siempre desde una perspectiva útil para ti y para mí. Cada día estoy más comprometido con este propósito.
Amo escribir en este blog (y en el otro) por todo lo que hacerlo me ha dado en estos nueve años. A todos los niveles, desde oportunidades para escribir mis primeros libros, a ideas, metodologías, estilo de vida, aprendizajes, derrotas, alegrías. Escribir en este blog a diario me permite generar oportunidades de negocio casi a diario, consultorías, conferencias, medios, apalancar proyectos, crear nuevos, servicios de agencia o acciones de marca.
Muchos entran y se van, otros entraron hace tiempo y no volverán. Otros en cambio entraron y no se fueron, otros entrarán y se quedarán. Los habrá que entraran a veces, casi siempre, siempre o nunca, hay de todo. Es genial, estoy agradecido, seguiré escribiendo y compartiendo de la manera que lo hago. Tú no me condicionarás, ni yo a ti.
No escribas para ser popular, no te intercambies por un puñado de likes o comentarios. Escribe para ser creíble, real y auténtico. Sé vulnerable, sé digna, sé transparente, sé honesto y sé humilde (en ocasiones).
Atribución imagen: Oscar Abad.
4 comentarios
No podría estar más de acuerdo Isra! Personalmente es de las cosas que más me ha costado, comencé en mi blog hablando de tecnología que al fin y al cabo es mi profesión, también hablaba de deporte, e incluso escribía reflexiones que me venían a la cabeza… pero siempre lo hacía buscando interacción, likes, etc… hace poco me paré y me puse a pensar en el porque de escribir y llegué a una conclusión que defines perfectamente con la frase: «escribo primero para mí y luego para tí»
Gracias amigo. Seguimos!!!
Magnífico haber llegado Oscar, ahora a disfrutar, crecer y encantar a la gente que resuene con tu trabajo.
Yo soy de las que entré y me quedé en tu blog. Confieso que siempre, siempre añades valor o me haces reflexionar. Aunque a veces no comparto algunos de tus enfoques, y es en esos momentos cuando mi campo de visión se amplía.
Mi experiencia en redes es de hace muy pocos años, poco a poco he ido aumentado en visibilidad y mi gran preocupación ha sido fruto de una mente comparativa (comparándome con grandes bloggers que trabajan el cambio, el desarrollo personal…), he intentado varias veces ser constante en mi blog, en mis redes…y fracaso. Hasta que he logrado conectar con mi esencia y es ahora que estoy empezando a crear los textos de mi nueva plataforma, en dónde quiero escribir sobre mi experiencia conviviendo con un diagnóstico de cáncer y a la vez emprendiendo y siguiendo con mi filosofía de vida (escalando montañas de todo el mundo y meditando).
Este verano he estado de bosque en bosque con mi camper, escalando en lugares solitarios y publicando en Instagram y es entonces cuando he comprobado que sólo cuando conecto con mi esencia mis textos pueden ayudar a activar cambios o he recibido algún feedback e incluso cliente que quiere trabajar conmigo. Por lo que…sí, he de pasar de métricas, likes, comparativas y métodos estándard encorsetados para ser yo y presentarme como realmente quiero proyectarme.
Gracias por compartirte disruptivamente.
Beti, alegre y contento de poder saber más de ti, una de esas personas que me regalan su atención y compromiso.
Exacto, solo cuando ese trabajo es crudo, es orgánico, es capaz de impactar positivament,en ti primero y luego en los demás. Siempre desde dentro hacia fuera.
Sigue dibujando ese mapa, es el camino.
Gracias a ti.