Después de Burning Man Quest y de todo lo que ha significado para mí y otras muchas personas, aprendí algo muy importante, el deporte y las grandes aventuras  o desafíos, son una poderosa herramienta para causar impacto positivo en el mundo. Por eso lanzamos Desafío por la Vida.

El cáncer, un desafío de todos

Hoy, junto a dos grandes amigos; Roberto G. Moreira y Christian Misle, presentamos una nueva aventura, un desafío solidario, una manera de crear cambio que importe, una manera de levantar la barrera y construir algo con propósito. Esto es Desafío por la Vida, tres distancias Ironman – 678 kilómetros  (3.9km. de natación x 3, 180km. de ciclismo x 3 y 42km. carrera a pie x 3) durante tres días seguidos en las ciudades de Santa Marta, Barranquilla y Cartagena en Colombia, el 4, 5 y 6 de junio de este año. Un desafío por los niños enfermos de cáncer, un desafío de Colombia, un desafío de todos.

La historia

Todo empezó cuando preparando Burning Man Quest, en unas entrevistas para la televisión aquí en Colombia, me preguntaron repetidamente si no tenía pensado en hacer algo así en este país. Bastaron tres preguntas similares para que empezáramos a pensar la manera de hacerlo. Entonces, le expuse la ida a Kalema y Lucía, parte de mi equipo de comunicación y relaciones públicas en Colombia, y me hablaron sobre la Fundación María José y el sensacional trabajo que estaban haciendo a favor de los niños con cáncer.

Al tiempo nos reunimos con Yipsel Bello, Presidenta de la Fundación. Según contaba, anualmente se presentan más de dos mil nuevos casos de cáncer en niños, niñas y adolescentes en todo el país, en la Fundación benefician a 230 niños a través del «plan padrino apapachando» que ofrece ayuda permanente y otros 200 más que se encuentran bajo la supervisión y seguimiento mientras ingresan al programa.

El trabajo que adelantan se basa principalmente en apoyar necesidades básicas como complemento a su tratamiento médico: psicología, nutrición, canasta familiar, transportes, asesoría jurídica, guía del tratamiento, alojamiento con hogares de paso aliados sin ningún costo para los beneficiarios, actividades lúdicas, congreso de cuidadores, programas creados con el fin de mejorar la calidad de vida de los niños y sus familias.

El objetivo

Este desafío no es simplemente deportivo, el propósito final es recolectar fondos para abrir el “Centro de Atención para Niños con Cáncer” en la ciudad Bogotá, que se convertirá en un lugar en el que los niños enfermos de cáncer de todo el país, encuentren además de apoyo para su tratamiento médico, esparcimiento, recreación, atención psicológica y bienestar, en un ambiente especialmente creado para ellos, que les permita seguir viviendo como esos pequeños genios que son los niños.

Las donaciones para llevar a cabo el proyecto se entregarán a la Fundación María José, una organización colombiana sin ánimo de lucro que durante más de 10 años se ha dedicado a acompañar a los niños con cáncer en todo el país y a sus familias, con el fin de proporcionarles apoyo social, emocional y espiritual.

El objetivo es recaudar 150 millones de pesos colombianos (57.400€). Sí, el cien por ciento de las donaciones irán directamente a la Fundación. Sí, volveremos a dejarnos la piel. Sí, volveremos a emplear nuestros recursos. Sí, volveremos a depositar toda nuestra energía, intento y determinación en llegar tan alto como podamos. Sí, haremos que suceda.

Mira, las personas tienen la capacidad innata de hacer cosas extraordinarias las unas por las otras. Nos sentimos agradecidos, honrados y dignos de vivir esta vida que hemos elegido. No, no tenemos cantidades ilimitadas de dinero, tampoco de tiempo, ni de atención u otros recursos. Sin embargo, sí poseemos una cantidad interminable de lo más preciado, humanidad y la oportunidad de iniciar pequeños movimientos que colisionen positivamente en el mundo, es lo que haremos en esta ocasión por estos «pequeñajos».

Cómo participar en Desafío por la Vida

Todo aquel que quiera se puede vincular de diferentes formas para apoyar la causa, o bien a través de esta plataforma online que hemos construido, especialmente diseñada para que todos puedan participar y sentirse parte de este cambio, o bien a través del modo convencional, directamente en el banco Bancolombia (sistema habilitado en estos próximos días) o por SMS desde Colombia.

1. Deportista solidario: consistirá en comprar un dorsal por cada niño de la fundación Maria José. Se hará llegar al donante, el dorsal con el nombre impreso de uno de los niños de la fundación, junto a un certificado de donación, una foto y una carta del propio niño.  La donación son 200.000 pesos, puesto que hay un número de dorsales limitados. Finalmente estos dorsales será copiados y los llevaremos entre los tres durante los tres días del desafío.

2. Dorsal cero: las personas que lo deseen pueden elegir un recorrido en la plataforma y hacer su donación como deportista simbólico, realizando de manera simbólica alguna parte de la prueba, en la ciudad que elijan, la disciplina que seleccionen y la distancia que escojan.

3. Ciudadano solidario: todos los ciudadanos pueden participar del reto aportando cualquier cantidad de dinero a través de la cuenta bancaria nacional con Bancolombia.

4. Supporter: aquellos donantes que compren la camiseta oficial de apoyo al desafío (opción disponible en esta próxima semana).

Estamos convencidos de que el deporte es una magnífica herramienta para el cambio porque inspira y transmite unos valores humanos increíbles: espíritu de equipo, liderazgo, respeto, solidaridad, dignidad y empatía, además de causar un enorme impacto positivo alrededor de todo el mundo.

Obligación, no oportunidad

Esta es la razón por la cual lanzamos Desafío por la Vida.

Estamos obligados a crear cambio por los privilegios que disfrutamos todos los días. Tu trabajo, tu acceso a Internet, tu educación, tu papel en la sociedad, etc. todo ello es una plataforma, algo más que una oportunidad, para aportar valor, una manera de devolver y honorar lo que te ha hecho llegar hasta este punto. Vamos, te estamos esperando.

 Artwork: Iam Charlie Abad.