Claro que lo es. Es urgente.
Pasamos el tiempo construyendo un plan B, C, D, E, F, G… y un día cuando estamos probando el plan A. El importante, se acaba el tiempo.
Permanecemos encallados en traumas, disputas, relaciones o trabajos que no nos permiten avanzar. Pensando que un día saldremos de ese atolladero. Un día, se acaba el tiempo antes de que hayas ni siquiera intentado salir.
Estamos enganchados a abogados, socios, agentes, comisionistas, jefes o supervisores porque pensamos que los necesitamos para entonces un día alzar el vuelo y despegar. Un día se acaba el tiempo y nunca llegas a despegar.
Leemos cada reseña en Amazon, vemos cada vídeo recomendación / tutorial en Youtube, leemos cada post sobre el asunto en cuestión. Vemos cada episodio de nuestra serie favorita, cada noticiero, leemos cada periódico. Nos informamos, pensando que un día haremos algo valioso con toda esas horas y horas de información o entretenimiento. Un día, antes de que te levantes del sofá, se acaba el tiempo y tú sigues incrustado en tu sillón.
Acabamos la carrera, iniciamos un master, luego otro, con suerte incluso otro. Asistimos a todas las conferencias posibles del sector que nos interesa y en el cual nos gustaría especializarnos. Vamos a cursos, más potentes y menos potentes. No paramos de supuestamente crecer y/o mejorar. Aprendemos, reflexionamos, absorbemos y volvemos a empezar. Pasamos por la fase del principiante, pensando que un día pondremos todo lo aprendido en acción, ajustaremos, intentaremos diferente y finalmente, llegaremos a la fase del maestro, la del dominio. Un día, el tiempo se acaba y nos encontramos en la fase del principiante.
Es urgente, muy
Por supuesto que lo es.
Estamos acostumbrados a ver grandeza, no a sentirla. A verla en los demás, no en nosotros mismos. Eso sucede porque no tenemos ese sentido de urgencia, el único día que nos damos cuenta la grandeza que hay dentro de nosotros, es cuando vamos a visitar el cementerio. Rechaza esta idea. Es urgente.
Si no posees el sentido de la urgencia que te recuerda que no vas a estar aquí para siempre. Esto es algo que cada mañana cuando me levanto, me repito a mi mismo «es urgente Isra, no vas a vivir para siempre. Y lo seguiré haciendo hasta el día en el que muera.
Toma la venta que reside en la oportunidad de nuestras vidas, la de percibir y vivir este sentido de urgencia. Utiliza tu tiempo para ti, para los tuyos, para materializar sueños, para ser grande.
Despierta tu sentido de urgencia. Es urgente.
Photo credit: Jill.
4 comentarios
En tu exquisita línea, nada me motiva más diariamente que lo que dijo Randy Pausch poco antes de fallecer: “En nuestro lecho de muerte no nos arrepentimos de las cosas que hemos hecho, sino de las cosas que no hemos hecho” -It’s not the things we do in life that we regret on our death bed, it is the things we do not-
Gracias por tu estímulo IG, es también urgente
Amén David. Seguimos.
Sí Isra, pero la paradoja es que aquellos que le hemos visto la cara a la muerte, la vida nos hace ver la urgencia después del disfrute, lo que a veces dificulta pasar a la acción.Gracias por hacerme reflexionar.
Hay que seguir Montse.