Ultimamente y debido a varios proyectos e iniciativas, estoy conectando de manera más cercana con mucha más gente que antes. Sin duda es algo que tomo como algo positivo, hasta que llega la saturación de amigos, conexiones, contactos, network, followers y bla bla bla… ya sabes que tener más de 150 amigos se vuelve algo realmente insostenible cuando tratas de conectar auténtica y emocionalmente con cada uno de ellos. A todo esto, no creo que podamos mantener más de 20 conversaciones a la vez, ni siquiera escuchar – y hacer algo con ese feedback – a un 20% de tu audiencia.
Me fascina observar los comportamientos de la gente, soy un aficionado a tratar de descifrar patrones de conducta, por algo mi pasatiempo favorito es observar a la gente observar.
Cuando la conexión falla
Al empezar e iniciar el contacto con muchas personas a las que antes no estabas conectado o expuesto y al mantener interacciones con ellos, notas la urgencia por vender, por sacar de ti lo mejor que tienes ahí dentro, por aprovecharse de eso que te hace único o por llevarse gratuitamente aquello que pueda otorgar una ventaja de una manera u otra. En algunos casos puedes llamarlo urgencia, en otros desesperación y en algunos obligación por contrato. Rara vez percibes la parte que lo cambia todo, precisamente aquella que está cargada de compromiso, dignidad, honestidad y valor. Es la parte en la que tu decides hacer algo sin esperar nada a cambio, la parte que ayuda y aporta un gran valor. Desafortunadamente buscamos con tanta ansia esa parte que nos perdemos en ese vasto mar de mediocridad y egoísmo donde están todos los demás, sí, los que están en la «media». Fundamentalmente, porque nunca nos detenemos a pensar si hemos ganado la atención de esa persona a través de una conexión merecida.
No puedes cambiar sino cambias
Siempre yo, luego ya veremos que podría hacer por ti, esta es la perspectiva que hemos adoptado cada vez que conectamos con otra persona en la Web Social. Esto no es más que cubrir nuestros intereses bajo un manto de humanidad y buenas voluntades, lo que es lo mismo, falsedad e interés.
Nunca podrás obtener lo mejor de otra persona, hasta que primero no te olvides de ti mismo y tus intereses y segundo, no crees una conexión genuina, digna y honesta. Ésta usualmente llega de un acto humano, llamémosle cambio, el cambio que llega cuando te interesas, preocupas y desvives por alguien – desinteresadamente.
Algo más, cambio no es cuando quieres vender tu producto, ni cuando pides un RT o cuando contactas por DM compartiendo un post de tu blog y diciendo «espero que te guste». No me atrevería a llamarlo conectar, ayudar o compartir.
¿Quieres que otra persona haga algo por ti? gana su atención siendo tremendamente útil y aportando el valor más preciado que nadie le haya podido otorgar. Luego permanece humano. De esa manera posibilitarás la resonancia.
¿Cómo conectas con otras personas de manera que logres ganar su atención?
Photo credit: javierdiaz1973.
Coño Isra, como me ha gustado el post de hoy. Grandes verdades las que dices, y gran tristeza también cuando descubres ese oculto interés, pero no tanto por ti, sino por todo lo que se está perdiendo esa persona al actuar así.
A tu pregunta, conecto sin querer conectar, con quien menos esperas hacerlo. Se honesto, y deja que las cosas surjan, si tiene que ocurrir, ocurrirá.
¡Un abrazo!
Éste lo has bordado, Isra.
Gracias.
Adelante!
Isra, gracias por transmitir el mensaje.
Esa es la verdadera esencia de la conexión humana y de esta era de la comunicación que ha evolucionado hasta las actuales redes sociales. Cuando hace más de una década estabamos los bloggers, no pensabamos en reputación online, influencia, branding, etc… pensabamos en aportar, ayudar, compartir, sin esperar nada a cambio. Y te puedo asegurar que al final recibiamos de nuestros lectores/seguidores mucho más de lo que cabriamos imaginar. Las relaciones con otros bloggeros eran auténticas. Personalmente… lo echo de menos ahora que todos usan los medios sociales como negocio, sin comprender que la parte humana y altruista es la que genera los mayores beneficios.
Algún día compartiré una gran historia personal que va más allá de lo que nunca hubiese esperado de alguien que ni siquiera conocía y que me hizo volver de donde estaba y creer de nuevo en el ser humano.
Personas con tu visión y corazón hacen mucha falta para inspirar a otros.
Te felicito y mil gracias por compartir!
thinking differently
y actúa más diferentemente aún.
Es la historia que tenía en mi cabeza y quería contar. Gracias.
Espero que esa historia la cuentes en http://mapamkers.es como ·creadora» (colaborador) de la plataforma, nos gustaría mucho contar con tu participación Malina.
Al respecto de tu comentario, es cierto. No sabemos o no nos hemos dado cuenta – o no queremos darnos cuenta – de que la economía de compartir es más potente que la ego-economía y eso está devaluando la conexión.
Gracias por tu aportación.
Exacto David, estamos malgastando esta gran oportunidad, principalmente por desconocimiento, realmente no sabemos todo lo que podríamos llegar a hacer con la nueva economía conectada.
La mejor conexión es genuina y espontánea. De acuerdo.
Gracias por tu comentario.
I will check it soon as posible. From those to
whom much is given, much is expected.
Comparto mucho tu reflexión. Yo lo suelo llamar «el amiguismo». Siempre digo que «en las carceles y los hospitales conocerás a tus amistades».
Detecto muy frecuentemente lo que comentas Israel, tán solo se acercan
si pueden conseguir algo, no por el simple echo de conectar y ver si
puede salir de ahí una amistad o colaboración. El egoismo es el peor
enemigo de un profesional, ya no de la venta -en una empresa todos somos
vendedores,sin vender no existiría la empresa- sino de cualquier
puesto. Si vemos quienes dejan huella -para algunos triunfar,aunque no
lo comparto- son aquellos que se prestan a compartir sus conocimientos
para ayudar a los demás de forma desinteresada. Mostrarte como
«transparente» y «decidido a compartir» en los social sin serlo
realmente puede ser la llave del fracaso. Y es que utilizan los social como cual teléfono de empresa para concertar una cita,y dicho canal no es exactamente eso.
Con honestidad, Isra. Comparto tu reflexión, sin maquillaje, sin resonancias, el mensaje es claro: si te preocupas en hacer crecer a los demás sinceramente la línea de meta va a tu encuentro.
Sí Malina, demasiada pompa, cuesta encontrar esa autenticidad pero siempre tenemos la posibilidad de seleccionar, decidir con quién colaborar.
Acertado post Isra.
Saludos
Gracias Isra. Estoy deseando que arranque mapmakers.es y participar de forma activa para promover «cambio».
Genial, a por ello, sucederá.
Para eso estamos aquí, para encontrar significado a nuestras vidas y ayudar a los demás a hacer lo mismo.
No pienses en quien no tiene la oportunidad, en lugar de eso invierte el tiempo en tratar de acercarla a esas personas que lo necesitan.
Puedes maldecir el sistema todo lo que quieras, hacer caso a la estadísticas o hablar sobre lo que Nielsen dice, o en lugar de eso puedes hacer algo por cambiar el resultado.
Si así lo haces enhorabuena.
La mejor estrategia que conozco es aquella que crea cambio positivo en las personas/empresas/entorno de manera honesta, sincera, digna y humana. Gracias por el comentario.
Al final está claro, si vienes a vendernos y a aprovecharte de nosotros lo sabremos y te señalaremos con el dedo – y nunca más compraremos de ti o te haremos caso. Exacto amigo.
En eso ando Isra. Espero que para ti sea un placer igual que para mí que algún día os acerque mi historia a través de mapamkers.
Internet lo cambia todo ¡por supuesto que sí!, también cambia el arma más poderosa que tenemos para cambiar el mundo: la educación. Y esa es mi vida y mi historia. La de proyectos colaborativos entre profesores de diferentes países, con diferentes culturas e idiomas, pero con un objetivo común. Cambiar el actual modelo educativo que mata la creatividad de nuestros niños que son unos auténticos genios digitales.