Lo has conseguido, tienes un poco de éxito.
- Puedes pagar tus recibos.
- Comprarte un buen coche.
- Vivir en una casa decente.
- Poder hacer un viaje en vacaciones.
- Hacer buenos regalos en navidades.
- Pagar la educación de tus hijos.
- Donar de vez en cuando a alguna causa benéfica.
- Competir con tu círculo de amigos.
Te va bien. Genial. Ahí es donde te quedas. Lejos de la incomodidad.
Y ahí permanecerás hasta que mueras.
Piensa sobre ello, así es cómo acabamos en la rutina. Y la única diferencia entre eso y una tumba es la profundidad del hoyo.
El grado de recompensa por el cuál serás recompensado es directamente proporcional al grado de trabajo duro que deposites.
Tu vida es un monumento a la dificultad y el dolor, la frustración, comodidad y toda la basura con la que tienes que lidiar cada día, y cómo de bueno eres lidiando con ella. Y no solo eso, sino cómo de bueno eres pidiendo más y más de esa basura, de esa m***** que hay comer.
Ser exitoso en la vida y crear la vida que quieres te va a requerir una constante evolución, progresión, autodisciplina, intención y actitud, también consistente hacia el siguiente camino.
Queremos movimiento
Así que esta es la salida, la única que hay, hacerte sentir incómodo como algo usual. Las cosas que te dan miedo, que te causan rechazo, que evitas, que te sobrepasan, son las cosas que tienes que hacer.
Queremos incomodidad.
Cuando haces algo para sentirte incómodo y permaneces ahí ¿sabes qué sucede? Pues que te condicionas para el éxito.
“Encuentra una situación cómoda”, “haz lo seguro”, “busca la comodidad”, “la posición confortable es la que gana”, “sé feliz”, “ten lo suficiente”…. Eso es lo que quizá alguien te dijo alguna vez, tus padres, profesor, jefe o los medios.
No, queremos libertad.
No queremos comodidad
Queremos una vida vibrante, aventurera y plena. Prosperidad y abundancia.
No queremos comodidad.
¿Cómo hacerlo entonces?
Implanta un superhábito donde a diario hagas cosas que normalmente no hagas. Eso te hará sentir miedo, pero te hará estirar tu zona de confort. Entonces, si lo haces no un día, no dos o diez, sino cientos y cientos de veces, a diario, se convertirá en una habilidad núcleo no solo tener éxito, sino de permanecer en el éxito.
Atribución imagen: Jim Champion.