Hoy finaliza el experimento cero excusas. Sí, 30 días cero excusas. 30 días luchando de forma más consciente contra el declive que significan las excusas, los quejidos, cupabilidad, lamentaciones, victimismo, auto-limitaciones o fustigaciones.
Hechos destacados últimos diez días
Cuando más ocupado estaba, menos tenía la posibilidad de caer en las trampas (venenos).
He tenido menos razones para caer en las trampas, cuando en realidad habían circunstancias más adversas.
He tenido que volver a apuntar cada trampa en la que caía, casi a tiempo real.
Cada vez que me quejaba, el sentimiento de malestar era más grande que en las anteriores semanas.
Resultados cuadro de mando día 20 al 30
Día 21:
- Quejas: 2.
- Fustigaciones: 3.
- Limitaciones: 1.
Día 22:
- Quejas: 4.
Día 23
- Quejas: 3.
- Excusas: 1.
- Culpas: 1.
- Fustigaciones: 1.
- Limitaciones: 1.
Día 24:
Quejas: 1.
Día 25:
- Cero.
Día 26:
- Quejas: 2.
- Culpa: 1.
- Excusas: 1.
Día 27
- Cero.
Día 28
Quejas: 5.
Día 29
- Quejas: 1.
- Culpa: 1
Día 30
- Quejas: 1.
- Excusas: 1.
- Fustigaciones:1.
Conclusiones finales 30 días cero excusas
En total, en los 30 días de experimento, sumé 90 trampas.
El 90% de las quejas vinieron por hechos insignificantes.
La queja es de las 6 trampas, la que más protagonismo ha tenido durante todo el experimento. Un total de 60 quejas.
La segunda trampa que más apareció fueron las excusas. Muy de lejos. Un total de 11 excusas.
La tercera, aunque con una cantidad poco significativa, como con las excusas, fue la culpa. Un total de 7 culpas.
Apenas he utilizado auto-limitaciones o fustigaciones, ni victimismo. Se resumen a un total de 12 entre las tres trampas.
Soy más consciente sobre prestar atención a mi lenguaje, pensamientos e intenciones. Al mismo tiempo que van ocurriendo, soy capaz de evaluarme.
El victimismo apenas ha aparecido entre las trampas en las que he caído.
Controlar el vivir sin ninguna de estas «trampas» es algo casi improbable.
He compartido el experimento con varias personas de mi entorno. Todas ellas argumentaron que lo más difícil es no quejarse.
Aprendes, creces o mejoras
Eso es lo que sucede con este tipo de expermento de estilo de vida. Unos te marcan más la vida y el trabajo, otros menos. Confieso que este no ha sido nada del otro mundo, en cuanto a experiencia personal. Sin embargo, me llevo bastante, sigo exprimiendo, el resultado es siempre positivo.
Photo credit: Suzette.