El objetivo de este sistema de ejecutar decisiones es reducir el tiempo entre pensar / reflexionar y decidir / ejecutar. El espacio de distancia que queda entre ambos, lo llamo tiempo en el limbo. Reducir ese tiempo en el limbo ejerce un impacto directo en tu velocidad de decisión y ejecución, por consiguiente también en tu ratio de tiempo-ingresos.
Las personas que hacen que las cosas sucedan, los ultraproductivos y los inconformistas, no confían solamente en sus notas, fuerza de voluntad y disciplina para ejecutar y decidir. Sino también en su instinto y en establecer sistemas de ejecución que puedan garantizar su eficacia a la hora de resolver cualquier tipo de circunstancia. Clarificar el tema muy rápido, identificar, planificar de forma consciente y actuar efectivo.
Sistema para ejecutar decisiones, diseccionado
A. Clarificación
Es útil tratar temas importantes con alguien que sabe hacer preguntas afiladas. Las preguntas certeras pueden ayudar a evaluar desde diferentes ángulos cualquiera que sea la circunstancia, esto permitirá divisar los puntos ciegos que todos tenemos. Busca a una sola persona que pueda cuestionar tus movimientos de forma íntegra, contundente y honesta.
B. Identificación
Después de la clarificación se necesita identificar si es un problema, es una tendencia, una acción, una anomalía, corrección, error, etc.
C. Planificación productiva
Cuando se sabe a lo que nos enfrentamos, es momento de planificar. Cuando las decisiones / operativa son demasiado grandes para tomar / implementar en un día, necesitamos dividirlas en bloques manejables. Busca una o dos acciones que puedas realizar esta semana para empezar a rodar y prioriza las mismas, sobre tareas urgentes pero relativamente poco importantes.
D. Actuar efectivo
Tienes una sola tarea importante que cumplir cada día, lo antes posible y sin ningún tipo de reflexión, decisión o pensamiento, principalmente porque ya ha sido hecho previamente. Una acción al momento, es ejecución, sin lógica, sin pensamiento y sin emoción, directa y sin vacilar.
