Encontrar el equilibrio entre:
- Estrategia y táctica.
- Conferencias y proyectos.
- Liderar y mancharte las manos.
- Vida personal y vida profesional.
- Viajar y estar en «casa».
- Deporte y alimentación.
- Conexión y desconexión.
- Intensidad y relax.
- Familia y amigos.
- Cualitativo y cuantitativo.
Podría parecer en ocasiones algo frustrante, un desafío o todo un arte.
La batalla por encontrar el equilibrio es un viaje, no un destino. El equilibrio suena menos como platos giratorios y más como pasar tu dedo por el borde de cuencos de cristal parcialmente llenos de líquidos a diferentes profundidades. El canto de cada cuenco emite un sonido único y como resultado, es música para el oído de «cada» uno. Cuando pensamos en la metáfora de los platos giratorios, pensamos en cómo nuestra búsqueda del equilibrio afecta a todos los que nuestro alrededor, así como también nuestra búsqueda de mantener todo girando simultáneamente sin caerse ni romperse.
Volviendo a la metáfora, cuando piensas sobre los cuencos, creas música, la música que te gusta uniendo diferentes sonidos. Y eso es diferente cada vez. La clave es, el equilibrio es un estado de lo que es importante para ti y aquellas personas a tu alrededor en el mismo momento.
Recuerda esto cuando aconsejes a alguien sobre cómo encontrar o recuperar el equilibrio.
Photo credit: Wendy.
6 comentarios
El equilibrio, algo tan deseado en la mayoría de ocasiones, como difícil de conseguir. La vida tiene planes que nosotros no contamos con ellos.
Ciertísimo Juanma, cuando descubrimos la vida, ésta tenía otros planes para nosotros.
Supongo que, el equilibrio es un estado muy personal con todo y con to@s l@s que te rodean en ese momento y situación, sentirte integrado en el espacio y en el tiempo en el que vives, y por ultimo, cada individuo a de encontrar su punto de equilibrio en su entorno cotidiano. Buen día a tod@s!
Exacto Ángel, el equilibrio es personal y único, el equilibrio de otros no necesariamente debe ser tu equilibrio.
En la mentalidad occidental, el equilibrio se suele ver como una especie de ‘valle’ equidistante entre dos extremos.
Sin embargo en la mentalidad oriental, el equilibro se suele ver como el ‘filo de una navaja’ en el que si te mueves, puedes caer indefectiblemente en cualquiera de los dos extremos…
Otros piensan que el equilibrio depende de cada persona y que cada una de ellas pueden encontrarlo en uno de los lados.