Los pilares maestros que encontramos en el 90% de colegios, universidades y escuelas de negocios, están destrozando cualquier sueño. Eso principios colocan a las personas en animación suspendida. Detiene nuestra creatividad. Paraliza nuestra curiosidad. Consigue que no avancemos todo lo óptimo que podríamos avanzar. Quedan alejados de respirar la tensión que marea.
Casi cualquier entorno educativo gira en torno al miedo, a la complacencia, a expectativas y a estándares comunes y mínimos. Simplemente porque es una forma económica, protocolaria y sistemática de asegurar obediencia y categorización. “Haz esto”, “sé esto”, “trabaja aquí”, alguien (profesor, tutor o formador) se apresura a persuadirnos. “De lo contrario, tendrás que conformarte con ser un don nadie”. ¿En serio?
He vivido experiencias desde muchos lados, trabajador ajeno, alumno, profesor, director, persona autodidacta, empresario, emprendedor y consultor. Vale, esto es lo que sé, aprender es difícil. Si fuera fácil ya sabrías todo lo que necesitas saber. Y si pudieras hacerlo tú mismo todo, no necesitarás depositar tiempo en leer estas líneas y/o en pagar a alguien para el intercambio.
Sin embargo, cuando intentamos aprender algo por nuestra cuenta, nos quedamos atascados. Muy a menudo.
Encuentra la tensión que importa
No, no es por el miedo, es por la tensión.
La tensión que enfrentamos cuando cruzamos un umbral. La tensión de que esto podría funcionar versus esto podría no funcionar. Sí, la tensión de que si aprendo esto… ¿estaré a gusto con la persona en la que me convertiré?
Tensión, una palabra necesaria. Un sello de calidad que procede a una enseñanza disruptiva de calidad. La tensión de no saber cuando estamos sobresaliendo hasta que sobresalimos. Esa tensión de poder perderlo todo en un abrir y cerrar de ojos. No estar seguro si todo lo que hemos construido nos garantizará un lugar en esta revolución.
Como adultos, nos exponemos a la tensión de una ópera, un concierto de jazz o un partido de baloncesto. Ya, pero, la mayoría de veces retrocedemos ante la tensión que importa porque hemos sido adoctrinados por el miedo. Dudas cuando tenemos la oportunidad de entrar en algo diez veces más grande que nosotros, porque eso podría significar peligro.
Los profesores efectivos, la educación extraordinaria, nos empujan hacia la tensión. Y personas como tú y como yo, tenemos que buscar esa tensión, porque es donde ocurre el retorno de inversión en labor emocional. Y porque eso nos empuja hacia una hendedura donde pocos llegan.
Hoy, hay 16 personas respirando ese tipo de tensión en Stand OUT Program Barcelona 2017. Enhorabuena y bienvenidos.
Atribución imagen: Charlie Abad Estudio.