Hace unos días escribía sobre el alto rendimiento cuando tienes familia. Hoy expando esa parte, completándola con algunos pequeños hacks de estilo de vida que pueden resultar muy útiles.
4 pequeños hacks de estilo de vida
1. Podcasts – escucha optimizada
Los podcasts siguen siendo una herramienta muy potente, por la versatilidad, practicidad y periodicidad con la que llegan y se pueden escuchar. La clave está en tener entre uno y cinco podcasts que sirvan como fuente de valor, y a la que acusadas cuando necesites algo concreto. También puedes buscar en el directorio cuando busques algo específico.
Lo importante es forzarte a extraer algo práctico cada 10-20 minutos de escucha, eso es lo que he hecho siempre y he sacado ideas para campañas de marketing, nuevos proyectos, subir el nivel de mi propio podcast y conocer (literalmente) cientos de hacks nuevos.
Los que escucho:
2. Convierte tu día en un ritual
Esto es algo que he hecho con las personas que he estado conviviendo en Tulum durante estas dos últimas semanas (los equipos de Outpost brands y Highline Wellness. Cuando alguien convive conmigo (o trabajo en un proyecto, o en una formación inversiva o en entrenamientos personales o empresariales), lo que le invito es a que ritualicemos el día juntos.
Hay varios estudios que muestran que las personas que hacen la cama, meditan, toman una ducha de agua fría, dan las gracias y escriben en la mañana, viven más felices y son más productivas (de eso va la Ultraproductividad). Para ti podría ser una práctica diaria con la cual anclar tu energía y mentalidad.
Por ejemplo: en la mañana, tomar agua, y varios complementos como este elixir, o un batido de proteína vegana o un zumo de superalimentos.
Meditar durante 3-5 minutos cada mañana cuando despiertas, luego realizar quietud, Yoga, Tai Chi y algo de quietud.
No hay que buscar prácticas elaboradas, largas y pesadas, sino aquello que te de un chispazo de empoderamiento y energía positiva. Es solo eso.
3. Evádete de la distracción infinita (fuera notificaciones)
Creo que esto seguirá estando a la orden del día, no importa cuantas veces me refiera a este hack. Desconecta todas las notificaciones, ruidos y llamadas de tu vida. Ya sabemos que pasa con la multitarea. Hemos sido reprogramados neurológicamente para obtener un chupito de dopamina cada vez que el teléfono se enciende. Vemos una luz o escuchamos un sonido y rápidamente perdemos la cabeza.
Pues escucha esto, lo aprendí tratando de enjaular al Monkey Mind, la siguiente vez que sepas que eso sucede, date cuenta de que te has descarriado de tu cometido y perdido la concentración. Lo siguiente que pasará será que estarás varios minutos en un estado de baja efectividad intentando pasar tu energía y enfoque de una cosa a otra sin mucho o nada de éxito.
La única notificación que recibo, son las notificaciones de calendario. No facebook, no instagram, no email, no llamadas o mensajes, eliminé WhatsApp en 2015. He intercambiado todos esos mini-chutes de dopamina por uno bien grande cuando compruebo el email una vez al día, o cada semana o dos reviso las redes sociales para responder e interactuar. Y lo más sorprendente, al hacerlo, no he quedado muy atrás en el progreso humano.
4. Sí o no, que demonios
Este es el hecho, o teoría: debemos invertir nuestro tiempo en la energía adecuada para las cosas adecuadas, las que están alineadas con nuestras pasiones más intrínsecas.
Dicho más fácil. si no puedes proclamar “a muerte, claro que sí” o “qué demonios, sí” con una gran vibración cuando una oportunidad se te presenta, no pienses más, es un “no”.
Hackearte es cuestión de cambiar, probar, experimentar y retar tu propio status quo. Y el segundo paso es hacerlo cubriendo todo el aspecto del potencial humano.
