No digas que quieres liderar, tampoco que eres un líder, no hables de que cualidades tiene, tampoco de su aptitudes, ni menos de su actitud. No va a servir que estudies que pasos ha de seguir y como lo debe hacer.
Si pretendes liderar, sal ahí fuera y lidera ahora. Haz algo por ellos, soporta su dolor, aguanta y reconoce sus errores como tuyos, falla por ellos y otórgales el crédito del éxito. Da un paso al frente, muestra tus ideales y arriesga creando movimientos que ayuden a las personas, ponte en la línea de fuego y construye algo que perdure en el tiempo, incluso cuando tu no estés.
Lo que importa en el liderazgo es lo que haces mientras nadie te ve, no lo que dices cuando todas las miradas están puestas en ti.
Si pretendes liderar, ve y lidera.
Photo credit: Daren Ruiz.
Un comentario
No se puede estar más de acuerdo