Forma parte de mi sistema establecer márgenes nuevos,
El pasado fin de semana decidí implantar una serie de márgenes nuevos en mi vida. Algunos serán más fáciles de adoptar y otros costarán bastante más. La cuestión es que sentí que necesitaba hacerlo si lo que pretendo es lograr mayor impacto, vivir más intensamente mientras bailo con el momento y hacer solo el trabajo que importa.
Mis márgenes nuevos
Estos son los cambios (o “hacks”) que hace unos días realicé en mi día a día:
- No realizar ninguna tarea profesional adicional que no esté en mi lista de tareas importantes dentro de la agenda diaria. Excepciones: tareas relacionadas estrictamente con impacto en el resultado empresarial. Con las tareas personales no aplica.
- Desconectar el teléfono a las 23h durante la semana. En el fin de semana podría oscilar dependiendo si estoy en casa o fuera.
- Dormir necesariamente 8:30h, prioridad absoluta.
- Practicar TRX tres veces por semana, ahora que hace buen tiempo y es accesible para mí, en la playa.
- Dejo de dar entrevistas para blogs.
- Ninguna de mis próximas conferencias será grabada y difundida en Internet, a menos que desde IG y el cliente así lo acordemos previamente por contrato.
- Reduzco drásticamente el tiempo dedicado a reuniones. De 30 minutos a 20 minutos por reunión y máximo 5 reuniones a la semana.
- Cuando termine el experimento 31 días de alimentación macrobiótica extrema, comeré todos los días mucha más verdura, será el 40% de mi alimentación.
- Recorto en un 30% mis gastos variables mensuales.
- Dedico entre 2 y 4 horas de deporte / entrenamiento al día. Y entre 1 y 3 de mindfulness.
- Paso a meditar 20 minutos al día en lugar de los 10 – 15 habituales.
- Cambio mi sistema “no hagas nada”, de recién levantado a mitad de la tarde, cuando más activo estoy.
- No respondo a llamadas de teléfono de nadie que no esté en mi agenda o lista de prioridades.
- Responderé a mensajes instantáneos una o dos veces al día.
- Dejo de comprobar las redes sociales con tanta frecuencia y paso únicamente a hacerlopor la mañana y por la noche.
- Abandono la prática de hablar por llenar huecos.
- Escucho un podcast nuevo al día.
- Dedico algo de espacio de tiempo al día a ver algo gracioso y divertido.
- Empiezo a formular más preguntas interesantes y afiladas a las personas con las que interactúo.
- Corto con el proceso de ilustrar cada conversación con alguna de mis vivencias, desafíos, logros o actuaciones.
- Lanzo un experimento cada 40 días.
- Desconecto Internet cuando hago el trabajo importante.
- Llevo las oportunidades que ofrezco hasta un coste marginal de una.
- Dedico cada día 1 hora extra a preparar conferencias.
¿Cómo estoy incrustando estos márgenes en mi rutina – de todo menos – cotidiana? Sencillo, disciplina, hacerlo y repetirlo cada día, sin descanso. Ver esta lista nada más abrir los ojos, darme cuenta de ella, tenerla en mente, ser aquello con lo que despierto y la oración con la que me acuesto. No conozco otra manera mejor de hacerlo, no sé hacerlo mejor que esto.
¿Tienes márgenes? Los necesitas.
Photo credit: Bart Maguire.
2 comentarios
Pero….pedazo de lista!!!! ¿te vas a acordar de todo? a ver si te vas a estresar con tantos limites a los margenes y va a ser peor el remedio que la enfermedad. Por otro lado, estoy de acuerdo contigo en que no sabemos ponernos límites y decir que no a cosas que no son nada necesarias o al menos mas prescindibles que otras.
Suerte en tu empeño.
Intentaremos llevarlos a cabo, será divertido, enriquecedor e intenso, seguro. Si algunos se escapan, los alcanzaré más adelante.