Este post ha sido escrito fruto de nuestra experiencia trabajando en los proyectos Bridges for Music y Burning Man Quest principalmente – y además inspirado en otras campañas.
Qué fundamentos tener en cuenta
1. Involucra a las personas afectadas por el proyecto: músicos, inscritos, los jóvenes de los townships de Langa.
2. Deja que estas personas cuenten la historia, probablemente ellos la llevan respirando mucho más tiempo que tú. Fragmentos de su experiencia, vivencias, anécdotas o aprendizajes.
3. Habla de la situación del proyecto o campaña. Cómo empieza, en qué estado se encuentra actualmente y cómo evolucionara en los próximos meses si la gente contribuye, a donde vamos a llegar juntos.
4. Clave: por qué debería participar en el proyecto cualquier persona que esté viendo el vídeo en esos momentos (o como lo llaman en kickstarter, por qué alguien debería ser un «backer»). Importante: qué beneficios obtendría a cambio, emocionales primero, luego tangibles. Acción: a cambio de su participación, tu (la organización o grupo de personas) debes comprometerte a algo que muestre tu compromiso.
5. Introduce enlaces en el vídeo directos a la plataforma de crowdfunding – o donaciones sociales – e instrucciones precisas sobre cómo hacerlo. Quizás hashtags. Si el vídeo está en Youtube o Vimeo, incluye el enlace en la descripción del vídeo también.
6. Sintetiza, el vídeo no debería durar más de tres minutos, no es fácil, hay que decir mucho en muy poco espacio. Establece un guión, practica, hacerlo a la primera es realmente complejo.
7. Finaliza con un «call to action», agradecimiento y frase contundente que inspire y motive a los visitantes.
8. Bonus: este es uno de los mejores vídeos que he visto realizar para una campaña de este tipo.
Como ya contaba en este post sobre Kickstarter, el vídeo es un elemento indispensable para cualquier campaña crowdfunding o iniciativa social.
2 comentarios
Fantástico!! El bonus también me ha encantado!!