La vida es impredecible, incierta, fascinante, misteriosa, ineludible. Y hay cosas ahí afuera que van a intentar derribarte. Aguantar es crítico.
Vendrán muchas alegrías, mucho júbilo, momentos de éxtasis. Aunque también aparecerán momentos de pánico, injusticia y perplejidad.
Cuando los momentos “felices” lleguen, disfrútalos, los mereces, seguro. Sin embargo, no te olvides, de que todo puede cambiar en menos de 30 minutos. Y apuesto que en ocasiones cambiará. No obstante, disfruta, celebra, baila, aprovecha, exprime.
Cuando llegue la parte difícil, los momentos de “tristeza” o “infelicidad”, piensa que es la otra parte de los momentos que disfrutaste. Van unidos, no puede haber unos sin los otros. Sin embargo, como esta es la parte que te causa problemas, vamos a detenernos y trabajar aquí…
Es fácil decir, cuando la tragedia llegue, cuando la dificultad llegue, pediré ayuda, abandonaré o miraré hacia otro lado.
No.
Eso es lo que escribo para ti, no.
Aguanta.
Y aguanta, aguanta, aguanta, y aguanta.
Sin importar qué tengas que aguantar, da igual lo que tengas que soportar.
Solo aguanta.
Y no abandones, nunca, nunca lo dejes.
Y si sientes que no puedes bajar más abajo, y no piensas que puedes encontrar una salida, genial.
Aguanta la tormenta
Porque eso quiere decir que el desafío final es ese que tienes frente a ti, lo que significa que solo puedes subir hacia arriba. Y también significa que las cosas serán complejas, más j******* de lo que crees.
Claro, estás en medio de una tormenta, sin escudos, sin ropa, sin lugar donde sujetarte, así es cómo lo ves desde tu perspectiva, crees que la tormenta está llevándose todo tu mundo. Pero yo te digo que no, esa “crisis” en la que te encuentras es te hace imposible ver fuera de ella misma. No ves el final, parece que la endemoniada tormenta lo cubre todo.
Pero no lo es.
Y no durará para siempre.
Puedes salir fuera y lo harás, y cuando lo hagas, verás el sol. De nuevo.
Pero ahora, has sido probado, forjado, por fuego, dolor y miedo.
Ese es el examen.
No suspendas ese examen.
Aguanta.
Avanza a través de la tormenta.
Y cuando salgas serás imparable.
Serás un luchador.
Un inconformista.
Un mapmaker.
Un superviviente.
Un ganador.
Victorioso.
Y libre, libre de esa tormenta.
Eso es.
Atribución imagen: CEBImagery // Patrick Emerson.