(Voy a utilizar el término como «auto»-«disciplina») ¿Has conocido alguna vez a una sola persona que sin auto-disciplina esté marcando la diferencia? ¿Cuántas personas que están dejando un gran legado lo han podido hacer sin la necesidad de incrustar esa auto-disciplina en sus vidas? ¿Cuánto éxito es capaz de llegar sin practicar la autodisciplina? Tanto tú como yo sabemos las respuestas a esas preguntas. No tengas miedo a admitirlo. No hay otra salida.
Nunca he conocido a una persona que marque la diferencia, que sobresalga, que sea inconformista, que esté dejando un legado y que esté triunfando sin auto-disciplina. ¿Por qué? Porque sin ella no serás capaz de actuar con efectividad, no serás capaz de mantener tu vida en orden. No podrás mantener y cumplir promesas, te pasarás de largo o no llegarás. El tiempo hará de ti su marioneta.
Parece como que todo el mundo quiere ir al paraíso, pero nadie está dispuesto a morir por ello. En el centro de todo, para poder hacer todo lo que te propongas, está la auto-disciplina, no hay nada más.
Importa al principio, importa al final
Al principio y al final de la recompensa, el gran salario, la adquisición por el fondo de inversión, el cinturón negro o el doctorado, está la disciplina que proviene del interior de uno mismo.
¿Qué quieres ser, hacer o alcanzar? Pianista, astrónomo, cirujano, poeta, matemático, profesor de Judo, atleta, maestro pizzero… Lo que sea, tengo la fórmula; miles de horas de una extraordinaria auto-disciplina práctica. Esa es la imposición sobre tu potencial, es el precio, la recompensa será una libertad que no imaginas. Lo cual quiere decir que cada libertad que posees en tu vida se adquiere pagando ese precio.
La (auto)disciplina es la raíz de todas las cosas buenas. No conozco efectos negativos por ser (auto)disciplinado. Es la raíz de todas las buenas cualidades, de todos los grandes superhabitos, de todas las habilidades núcleo más potentes. La raíz de la más potente Ultraproductividad. Y sin duda alguna, el pináculo del alto rendimiento holístico. La auto-disciplina te ayudará con cualquier cosa que decidas maximizar, lo que sea.
Aplica la auto-disciplina o vete a casa
Sin embargo, de nada sirve escribir o discutir sobre ello. El gran obstáculo es que o la tienes o no la tienes. Si la tienes, entonces debes aplicarla cada día de tu vida, de lo contrario es como no tenerla. Y si no la tiene tienes que entrenarla y aplicarla, sin descanso, cada día de tu vida también. Aplicarla. ¿Cómo? Puedes empezar por este podcast dedicado en exclusiva a esa tarea.
No es meditar durante 30 minutos, no es madrugar a las 4am, no es pedalear 150 kilómetros. Es trabajar cada día para hacerte más robusto, sano, resistente, inteligente, empático, consistente y con el tiempo, sabio.
La disciplina no es nada más que entrenamiento. La auto-disciplina es entrenamiento en ti mismo.
Atribución imagen: MCRD Parris Island // Luke Garnet.