¿Qué persigues? ¿Qué te persigue? ¿Te persigue alguien? ¿Es esfuerzo y persistencia o no esfuerzo y no persistencia? Esa es la pregunta. O al menos parce ser el mensaje de cualquier persona que sigues en las redes sociales.
Siempre que entres a Instagram, Facebook o Twitter, siempre que lo hagas, encontrarás alguien que va en un avión en clase ejecutiva. O alguien que va viajando a algún evento importante. Encontrarás una reunión de negocios, algún evento de la industria donde no participas, una oportunidad de negocios que desearías que fuera tuya, y mucho más. Parece como que todo el mundo está persistiendo y esforzándose, incluso más que nunca. Sin embargo, el mensaje que a menudo recibes es «no estás esforzándote o persistiendo lo suficiente». Facebook e Instagram narran esta historia, y nosotros asentimos con la cabeza: «cualquiera es más interesante, exitoso y popular que yo, ¿Por qué no soy yo esa persona? ¿Qué es lo que he hecho mal?
Esfuerzo y persistencia
La felicidad no es cosa de la intensidad, sino del equilibrio, el orden, el ritmo y la armonía.
Ayer tuvimos descanso en PEIG, mientras descansaba, vole a Málaga para cerrar la ICO de Cryptosloartech. Recaudamos 60 millones de Euros, hemos hecho que algo grande suceda. Con esfuerzo y persistencia.
Piensa sobre el esfuerzo y la persistencia, te llevarán a cualquier lugar. Al menos así ha sido conmigo y con muchos otros que tú y yo conocemos. Piensa en lo opuesto, en darte permiso, de vez en cuando, parar de esforzarte y descansar. Y parar de persistir y rendirte. Pienso que saber estar en los dos polos opuestos es algo muy valioso.
Debemos entender que no podemos obsesionarnos con los logros. Ser adictos a conseguir éxitos es peligroso. Como lo podría ser estar en el lado contrario. Llevo 17 años de esfuerzo y persistencia. Y tú seguro que más. Hemos fallado, hemos aprendido, hemos caído exhaustos, hemos declarado victorias. Seguro. Sin embargo, yo, no hace mucho, me di cuenta de que la vida está para vivirla. No para vivir de forma neurótica tratando de alcanzar la próxima meta.
La peligrosa carrera por el sobreesfuerzo
Esto no es una carrera por vender más libros que nadie, tampoco por leer más libros que nadie. La vida, creo, no va sobre trabajar más que nadie, dormir menos horas y sentirte orgulloso de ello, o tener más hobbies extremos que otros. Rechazo la idea de golpearme a mí mismo o machacarme por cualquier consejo no solicitado que «debería» estar siguiendo y no sigo. Ignoro lo que la mayoría de grandes iconos dicen que necesitamos hacer.
Hay muchos de nosotros dejando ser definidos por el número de horas que somos capaces de trabajar. Obsesionados por la cantidad de grandes marcas o clientes con los que podemos trabajar para luego nombrarlos en una bonita lista. Ni tu vida, ni la mía, son la suma total de nuestras identidades. Me preocupa (por ti especialmente) el glamour que le damos al emprender, al fracasar y al esfuerzo desmesurado. Estamos pagando un precio demasiado alto por todo esto.
Tu esfuerzo y persistencia no te hará una persona de éxito, sino la capacidad por encontrar el equilibro contrapuesto entre ambas cosas.