Internet ha supuesto un cambio de paradigma en nuestras vidas, no sólo de manera profesional, sino también personal, de repente un nuevo mundo de oportunidades profesionales se abría ante nosotros mientras permanecíamos incrédulos ante lo que estaba sucediendo. En el aspecto personal, Internet facilitaba una herramienta con la que poder expresarnos al mundo, comenzábamos a tener una voz y eso aterrorizaba al status quo, que veía amenazada su existencia.
Interrupción del sistema
Si la gente normal y corriente – en mi opinión, los únicos capaces de poder hacer cosas extraordinarias – poseían los medios para expresar sus ideas, conectar con personas que pensaran igual que ellos, compartieran las mismas inquietudes y poder ejercer movimiento en el mundo por sus propios esfuerzos, entonces podría haber una revolución. Internet fue el inicio de la interrupción del sistema en el que habíamos vivido hasta entonces. Internet supuso una disrupción en la forma de comunicarnos, hacer marketing, vender, trabajar, ayudar y vivir.
Las personas como centro
Luego hubo una revolución mayor incluso que Internet, apareció la Web Social con social media o lo que llaman, las redes sociales. De nuevo volvieron a cambiar los paradigmas, se descentralizó la comunicación y el marketing masivo e intrusivo empezó su declive. El sistema que conocíamos empezaba a derrumbarse. Nuevo valores empezaron a emerger en la comunicación, transparencia, autenticidad, coherencia, compromiso y vinculación emocional, el centro esta vez ya no tenía nada que ver con las empresas y si cada vez más con las personas.
Crear y compartir significado
El reto verdadero de este mundo online en el que vivimos está en crear y lanzar algo que verdaderamente tenga significado, que entregue valor al mundo y ayude a las personas. No podemos crear negocios sostenibles sino creamos resonancia con las personas que hay detrás de estos negocios, nunca antes había sido tan fácil llegar a cualquier persona en la faz de la tierra como hasta ahora. El entorno online es el medio, Social Media es el vehículo para lograrlo.
Internet y la Web Social es lo que necesitamos para poder progresar, crecer y salir de este escenario en el que nos encontramos.
Permanece humano
Ahora puedes encontrar trabajo en un proyecto de de software para doctores con una compañía en nueva york, ser nombrado consejero social media para una agencia de Londres, escribir para una de las fuentes más importantes de recursos social media de la Web o ser contratado para dar conferencias en lugares como México, USA, o Australia. Es terroríficamente simple de explicar, sólo hay que hacer dos cosas, ser y permanecer humano y utilizar el medio del que dispones para hacer que algo suceda. o ¿Vas a crear cambio porque contestas a los emails inmediatamente, Twiteas más a menudo, tienes muchos «amigos» en Facebook y te quedas en el trabajo una hora más tarde que cualquier otro de tus compañeros? Lo dudo.
Vamos hacia un presente humano-digital, donde cada vez importan más las competencias y habilidades interpersonales desarrolladas en un entorno online, pero – y esto podría suponer un gran pero – que de ninguna manera deberían acabar tan sólo en ese punto. Hablo del presente, porque pienso que el futuro es una distracción, algo que nos aleja de la realidad y de iniciar esos movimientos que tanto necesitamos, esos rayos de de luz en forma de start-up, marca personal o cualquier otra iniciativa. El futuro no es más que una extensión de nuestras acciones presentes.
La economía en la que vivimos necesita nombres. Internet, la Web Social y Human Media nos proporciona la oportunidad de ser uno de esos nombres.
Por favor no ignores las oportunidades diarias de las que dispones para cambiarlo todo. Ahora es posible.
Photo credit: Gilad Benari.