¿Qué es lo que hace a una persona exitosa? ¿O qué la hace especial? ¿El dinero, la fama o el color de sus ojos? ¿Es quizás el grado de crecimiento personal y profesional que haya experimentado a lo largo de todo lo que lleve vivido? ¿O acaso la cantidad de grandes amigos o viajes o momentos sin respiración que haya vivido? ¿Es lo de fuera o lo de dentro? Posiblemente sea una suma del todo. Es algo que trato de preguntarme a menudo cuando estoy con gente que tiene ese halo, sea lo que sea, es cierto que es una especie de halo que envuelven a grandes personas.
Pedro Castelló sería otro buen ejemplo en el que fijarse, obviamente no todo el tiempo, no para todo, ni siempre, pero si el tiempo suficiente como para poder aportar algo más allá de la media. Después de todo nadie somos un ejemplo tan cristalino al que imitar, ser el mejor tú es la alternativa a la que apuntar para salir hacia arriba.
Conocí a Pedro creo que sobre el 2012 si no me engaño, a través de Lucas y Stephan, son amigos de toda la vida y en la celebración de mi cumpleaños en Ibiza se vino con ellos y a raíz de ahí fuimos estrechando relación, pasó a ser un buen amigo y más tarde pude compartir trabajo con él cuando Pedro decidió dar otro paso más allá a lo lejos y entrar en Stand OUT Program.
Sobresale
Por elegir la opción menos segura, por buscar un nuevo ángulo desde donde desarrollar su trabajo, pero principalmente por aprender a aprender, más rápido, mejor y sin descanso. Eso es precisamente lo que muchos evitan, paradójicamente es lo que más necesitamos hacer. Pedro un día lo entendió, desordenó el puzzle y empezó a mover las piezas en una dirección poco corriente pero no por eso equívoca. Hoy habiendo pasado casi más de un año, sigue avanzando, generando acciones que mejoren su vida, la de la gente de su alrededor y la de sus clientes.
Las personas piensan que sobresalir es fácil, no sabría decir exactamente si eso es verdad o no, por experiencia personal no lo es, por eso admiro a personas como pedro y otros agentes del cambio (Mapmakers) que lo hacen. Dejar a un lado una historia llena de «tengo qués», limitaciones y obediencia, para ser la persona que deja de perpetuar el sistema y agarrar bien fuerte el único permiso que ahora se necesita para vivir la vida que siempre quisiste, sí, el más importante y necesario de los permisos, el tuyo propio.
Extraordinario
Es cuando una persona que ya tiene casi todo hecho en la vida, no corre riesgo, tiene la estabilidad personal y profesional necesaria como para vivir placenteramente y la mayoría de cosas que quiere o puede hacer al alcance de sus manos, decida pasar de rosca el tornillo de la vida y quizás la manera en la que trabaja y hace lo que hace. No por necesidad, o sí, sino por mejorar, por darte cuenta de la equivocación, de aquello que podría estar sesgándote y de los desconocido, incierto e ignorante. Eso es lo que he visto siempre que he mirado fijamente a los ojos de Pedro.
Su especialidad profesional es el diseño, cuidado y mantenimiento de espacios ajardinados, con su propia empresa que él mismo dirige, donde trabaja como un empleado más, lidera, cobra, paga y comercializa, principalmente en la zona de Jávea, Denia, Altea, Calpe y ahora extendiendo a Benidorm, Oliva, Gandía, Valencia, Alicante y llegando a otras comunidades. El secreto para no sentir «la crisis», entregar mejor resultado, más atención, el triple de compromiso y una honestidad y excelencia brutal. Pedro elige cambiar primero su entorno más cercano y si lo consigue, empezar a ir subiendo capas hacia arriba.
Estás aquí por la aventura y la emoción
Es precisamente lo que me da la sensación que Pedro piensa nada más despertar cada mañana, si no me costaría entender porque empiezas de nuevo cosas que a simple vista no empezarías, como trabajar los fines de semana en un restaurante echando una mano a sus amigos en lugar de estar un sábado o domingo en tu casa, despreocupado o de juerga (creo que lo último sigue haciéndolo igual), o adelantar todo tu trabajo para poder marcharte medio año a otro país a aprender la lengua inglesa con el fin de llegar a nuevos nichos de su mercado y poder encantar a los clientes que ya existen en su cartera. Con toda seguridad me atrevería a decir que Pedro no está aquí por la paga mensual, sino por la adrenalina de hacer algo que le sacuda su mente.
Que estupenda lección estar a lado de personas como Pedro Castelló, aprender a hacer algo importante y entonces ser humilde, fiel y descarado. Convertir tu trabajo en una plataforma que te permita conectar con otros a los que tu profesión podría maravillarles. Ser querido, recordado y echado de menos por lo que haces y no lo que dices.
Gracias por sobresalir Pedro.
Photo credit: Víctor Ronco.