Si buscas excelentemente extrañas maneras de pensar y actuar, tendrás que ir más allá de los convencionalismos. Además de rechazar admitir como válido un solo dogma, necesitarás abrazar cualquier corriente filosófica como elemento válido.
Ayer estaba con María Maestro trabajando en Madrid en uno de los dos libros que publicaré en 2018, en un descanso comenzamos hablar sobre el desapego, la ecuanimidad, la austeridad del estoicismo, autoconocimiento, autodominio, autodisciplina y otros temas. En el intercambio y con la pregunta de María; «Isra, ¿Y cual es tu filosofía de vida?» Me di cuenta de que ésta estaba compuesta por todo lo que he ido aprendiendo de otros dogmas, corriente filosóficas y vivencias vitales que ido viviendo a través de mis 35 años. Siendo todo absorbido por quién soy. Es decir, los momentos que creamos, son las experiencias que nos definen.
Autoxpresión sobre imitación
Pienso, cada vez con más firmeza, que la esencia de una vida auténtica, plena y real está en elegir la autoexpresión radical sobre la imitación.
En ocasiones quedamos tan prendidos de nuestros iconos, jefes, pareja, familiares o héroes, que nos convertimos en copias casi exactas de ellos mismos. Mi preocupación – y la tuya – debería estar en elegir un estilo particular de acción que no deje espacio a la autoexpresión radical que cada uno de nosotros, seres humanos, necesitamos para manifestar la esencia de grandeza que todos poseemos. En mayor o menor medida.
La mejora y el desarrollo de uno mismo no tiene porque estar relacionado con copiar una historia de éxito. No, tiene que ver con observar e iterar de forma individual e íntima.
Entendiéndote primero a ti mismo, tendrás una mejor idea de aquello que es útil y aquello que no. Y desde ahí, entonces, podrás construir solo sobre lo que es relevante.
Aprender no es mera imitación, ni tampoco la habilidad de acumular y conformar conocimiento fijo. Aprender es un proceso constante de descubrimiento, un proceso que nunca concluye.
Cualquier persona puede aprender casi de cualquier cosa, y merece la pena desarrollar este tipo de mentalidad. Dicho esto, con algunas excepciones, la mejora siempre debería formar tu propia expresión. Eso en lugar de moldear lo que extraigas de la lección aprendida.
Cualquier desarrollo valioso empieza en la capa de quién eres y quién sabes que eres de verdad. Esto no significa que esas partes no puedan cambiar a mejor y que no debas buscar mejorarlas. Significa que hay que empezar de forma interna.
Una vez que tienes una base sólida de confianza intelectual, tu meta debería ser iterar y mejorar, no abandonar y no intentar ser alguien que no eres.
Las personas, muy a menudo, quedamos estancadas en los ejemplos de nuestros aprendizajes. Y aunque en ocasiones puede ser algo bueno, la mayoría de veces nos roba nuestro extraordinario ADN.
Si buscas, busca para observar el aprendizaje, pero sin apego.
Pensar y actuar como nadie más que tú
Si piensas como todos los demás, estarás cometiendo los mismos errores que ellos. Pensar y actuar por ti mismo no es solo lo óptimo para alcanzar el alto rendimiento, sino es también la forma de llevarte siempre adelante.
¿Sabes qué es lo que cambia? No tu trabajo, no tu producto, no tus servicios, sino tu estilo independiente de pensamiento y actuación. Eso es lo que dejarás y cambiará las cosas.
Saber cómo encontrar excelentemente extrañas formas de pensar y actuar no va sobre rechazar ideas existentes, por favor no. Va sobre ser crítico, cuidadoso y bravo cuando tomes decisiones importantes.
Tu mente es la responsable de cualquier cosa que aparezca en tu vida. Dale la ventaja adecuada.
Atribución imagen: Huawei – Guateque Valencia.
2 comentarios
Genial post. Para momentos en los que tus ‘yo’ pelean y necesitas saber quién eres.
Vamos a ello Juan – MAN.