«¿Por qué voy a hacer un Ultraman?» Eso es lo que me pregunté durante un buen tiempo…

Esto fue lo que inició la chispa para inscribirme: ego y dark side.

Cuando ya había dado el paso parecía que sería fácil volver atrás. Ya que sólo admitían 25 participantes en todo el mundo, ser uno de los 25 era bastante poco probable. Las plazas se lanzaron en Mayo 2012 y tenían prioridad aquellos que habían realizado algún otro Ultraman con anterioridad. Igualmente era requisito indispensable haber terminado por lo menos un Ironman.

Inconsciencia = hacer que suceda deliberadamente

Para no quedarme fuera rellené la solicitud sin pensarlo mucho y la envié, inconsciencia total. Desde que dije que iba a participar hasta que envié la solicitud no pasaron ni siquiera 48 ¿inconsciencia o hacer que suceda? En la misma solicitud también señalé el Ironman de UK al que me había inscrito apenas hace un mes (con menos de un mes de diferencia entre prueba y prueba).

Al día siguiente Pablo y Enrico me dijeron que como no podían participar por los requisitos, iban a inscribirse en el «did it spain» misma distancia pero celebrado por la zona más interior de Alicante. En ese momento pensé: «bueno como no voy a ser seleccionado pues mejor…» Octavio que también lo iba a hacer me dijo que había decidido centrar su esfuerzos en competir profesionalmente por el campeonato en la modalidad de triatlón sprint, suponiendo esto que tampoco lo iba a hacer.

El lío más grande y profundo de mi vida

Uno de esos días, hablando con Josef le dije que me había inscrito, pero que no me seleccionarían, entonces él me dijo «vas a ser uno de los seleccionados, así tendré alguien en Ibiza con quien entrenar, eso si, prepárate para darle muchas vueltas a la isla».

Era un viernes, salí a correr por la mañana y mientras estaba haciendo deporte dentro de mi pensé «ahora cuando llegue a casa, habré recibido un email diciendo que había sido admitido» de repente, sin saber muy bien por qué, tenía unas ganas tremendas de estar metido en ese gran lío, insconciencia.

En efecto, cuando llegué a casa y eché un vistazo a la bandeja de entrada había recibido un correo de la organización de Ultraman UK felicitándome y dándome la enhorabuena porque iba a ser uno de los 25 participantes de Ultraman UK. Bien, en ese mismo momento no cabía en mi mismo de la felicidad, media hora más tarde no sabía si reír o llorar. Ya lo pensaría más tarde, era muy pronto todavía para saber la que se me echaba encima.

Ultraman UK

Esta es la historia. El 31 de agosto si un meteorito no cae en la tierra, estaré en (localización) para tratar la épica, por lo menos para mi, de completar este «ultra endurance event», una prueba que consiste en 3 días:

•  Día 1: 10km nado + 145km bici.
• Día 2: 275km bici
• Dia 3: 84 km run.

Es una prueba un poco diferente al resto, ya que tu debes traer a tu propio equipo, con tus propios avituallamientos, transporte – excepto zodiac – apoyo logístico, alimentos, bebida y cualquier otro menester, no estoy seguro todavía si necesitas también un fisio o lo pone la organización. Aquí es donde me pregunto donde van loas 1.200 eur que pagas para inscribirte. Magia.

Afortunadamente, sólo comunicar que había sido seleccionado, Lucas, Stephan y mi entrenado Octavio, subieron enseguida a la palestra y se ofrecieron como equipo de apoyo, luego se sumaría al equipo Nando, ya había un gran equipo.

Al poco tiempo Mariadel Villaespesa se ofreció a documentar toda la prueba audiovisualmente hablando. Poco tiempo después cerraría mi sponsor principal con Ciclos Boyer y más tarde con 2226ERS como sponsor alimenticio y suplementicio y recientemente con Intersport Rull como sponsor técnico.

Maldita o bendita inconsciencia

¿Por qué voy a hacer un Ultraman? principalmente por inconsciencia, síntoma de irracionalidad, una pizca de locura y una valentía insultante hasta la insensatez. La inconsciencia es buena porque no te das cuenta donde te has metido hasta que ya no hay marcha atrás. La segunda razón de hacerlo y quizás sí es la más importante, es porque si en un Ironman he aprendido todo esto, sólo pensando que voy a aprender aquí, es motivo suficiente para empujarme a mi mismo y lanzarme al vacío. A ver que pasa.

Ya estamos de nuevo… imposible

Imposible, bien, es lo de siempre, no es imposible, me costará el mayor esfuerzo de mi vida, horas y horas de entrenamiento, días en los que no quieres continuar y arrojar la toalla, litros de sudor, algún disgusto, confrontamientos con lo más profundo de mi dark side. Me costará dinero, algo de salud, horas de sacrificio en lugar de disfrute con la gente que quiero.

Admito que he tenido Ultraman en la cabeza todo el año, pero olvidé que en mi vida no existe un mapa – verdaderamente – y lo que no sabía es que este año iba ser aún más intenso y no podría empezar a entrenar en serio hasta a partir de finales de marzo, justamente cuando me lesioné en el tendón de aquiles y tuve que permanecer en reposo hasta finales de Abril. Admito que meterme algo así ha sido fruto de mi inconsciencia.

Es posible que no esté preparado, pero estoy dispuesto a llegar allí donde nunca jamás imaginé que llegaría, ya sabes imposible.

Y de nuevo me pregunto: ¿Por qué voy a hacer un Ultraman? ¿Y por qué no hacerlo? respondo.

Haremos que suceda o moriremos intentándolo.

Extra – adicional: accede aquí al experimento posterior, Actividad Deportiva OFF – «el gran descanso» donde paré todo ejercicio físico durante 60 días.