¿Te has mirado alguna vez en el espejo y te has dicho a ti mismo algo de lo siguiente?
«Me decepcioné a mí mismo»
«Me mentí a mí misma»
«Fui yo el que maté a mis propios sueños»
«Me anulé a mí mismo»
«Me hice a daño a mí misma»
«Cancelé a mi genio interior»
«Me frustré a mí mismo»
«Me frené a mí misma»
«Ignoré a mi propia intención»
«Me apegué a mí mismo«
«Me desconecté de mí misma»
Probablemente no. Y es una pena, porque es ahí donde empezamos a darnos cuenta de que no hay nadie que pueda penetrar tan profundo en nosotros mismos que uno mismo.
Te debes a ti mismo.
Nunca llegarás a ningún sitio con excusas.
Muchos de nosotros no hemos nacido en el sitio más privilegiado. Nuestros padres no tenían una red influyente de contactos. No conocíamos a muchas personas que levantaran un dedo y nos abrieran las puertas. Estábamos lejos de formar parte de todos esos clubs honoríficos.
Aunque nos dio igual. Lo hicimos igualmente.
Llegamos donde todos ellos llegaron.
Conseguimos más que los agraciados.
¿Por qué? Porque nos lo debemos, a nosotros mismos.
Solo tú puedes pararte a ti mismo. Es tan sencillo de ver pero difícil de entender.
Tienes que quitarte de encima toda esa carga emocional de que si cuando eras pequeño esto o lo otro, que si cuando eras adolescente tenías este complejo o el otro, que si otros te llamaban XXXXX o YYYYYYY. O que nunca has tenido suerte con _______________ o ______________, mira, aquí todos comemos porquería de una forma u otra, esto está fuera de toda duda. No importa si comes más o menos, lo que sí importa es ver esa bazofia, injusticia, desesperación como entrenamiento para llevarte o ver algo que no tenías o habías visto, algo que hará que una nueva luz se encienda en ti.
«¿Qué no hiciste y no aprendiste cuando pasaste por esa adversidad?» y «¿Qué no has hecho todavía que sabes que hay que hacer porque forma parte de tu camino?» Estas son las preguntas que te ayudarán a hacer lo que te debes a ti mismo.
Ahora ya puedes ir y hacer tu vida legendaria, te lo debes, menos que eso es un crimen.
Pd. Hoy termina el primer programa de Alto Rendimiento Holístico 1:1 que he llevado a cabo en España. 5 días de inmersión y aislamiento, desbloqueando, propulsando, equilibrando y optimizando a Toni Arco, a través de las 4 dimensiones del potencial humano. Hemos trabajado sin descanso, día y noche, codo a codo con Toni (la primera persona/cliente que ha vivido la experiencia al completo), por eso quiero dedicarle esta sacudida.
