Aquí I. escribiendo. Desde 2010, cada año cierro con una reflexión que guía mi enfoque para los siguientes doce meses. Este ejercicio y superhábito, que aprendí de Chris Brogan, lo llamo “Mis Tres Palabras”, es más que un simple ritual: es una forma de establecer una guía clara que alinea mis acciones con mis valores y prioridades. Para 2025, he elegido primero tres palabras palabras que reflejan mi estado actual y que ya estoy cultivando en este nuevo ciclo: Virtud, Aterrizaje, Kensho. Acompañadas de dos más que utilizaré como pilares maestros: Paciencia y Realización. Estas palabras son un mapa para avanzar con integridad, claridad y profundidad.

¿Por qué tres palabras para 2025?

Desde 2010, al finalizar cada año, me doy un espacio para reflexionar profundamente sobre el camino recorrido y sobre el que quiero trazar para el siguiente ciclo. Este ejercicio, que llamo “Mis Tres Palabras”, ha sido una constante en mi vida, una tradición personal que me permite establecer una guía clara para avanzar con intención, significado y dirección. Es un más que un simple ritual: alineo mis acciones con mis valores y prioridades, eso es Ultraproductividad

Mis Tres Palabras 2025: Virtud, Aterrizaje y Kensho

Ahora, tras cuatro años de exploración radical en La Gran Victoria, donde he desafiado cada norma, desaprendido lo establecido y abrazado lo desconocido, estas palabras tienen un significado aún más profundo. Son mi ancla en este proceso de aterrizaje, mi compás en esta nueva etapa.

Para 2025, he elegido primero tres palabras palabras que reflejan mi estado actual y lo que ya estoy cultivando en este nuevo ciclo: Virtud, Aterrizaje y Kensho. Luego he elegido otras dos palabras como pilares fundamentales: Paciencia y Realización. Y finalmente, la palabra núcleo: Shin Jin Datsu Raku, Cada una refleja una parte esencial del proceso de volver, recalibrar y seguir elevándome.

1. Virtud: El Arte de Vivir con Excelencia

Esta es una palabra que ya repetí, fue en 2021. La virtud es el código interno que me sostiene. No es algo que se obtiene, es algo que se cultiva día a día, momento a momento. Durante La Gran Victoria, comprendí que la excelencia no es una meta, sino una práctica continua que implica vivir en total coherencia con mis valores. Virtud es tener el coraje de tomar decisiones alineadas con lo que soy, incluso cuando es difícil, incluso cuando duele.

Cómo me aseguraré de que la virtud sea mi guía:

• Retando cada acción y decisión contra mis principios fundamentales.
• Priorizando la honestidad brutal, conmigo mismo y con los demás.
• Practicando la maestría en las pequeñas cosas, porque son las que determinan la grandeza.

2. Aterrizaje: Vivir con Presencia y Gratitud

Aterrizar no es detenerse, es integrarlo todo. Después de cuatro años de desafío constante, de soltar lo conocido y adentrarme en lo incierto, ahora toca bajar a tierra con consciencia plena. No hay prisa. No hay urgencia. Solo hay espacio para respirar, observar y apreciar.

Cómo me aseguraré de que el aterrizaje sea mi guía:

• Dedicando tiempo cada día a la contemplación y al silencio.
• Estableciendo un ritmo que me permita disfrutar, sin forzar.
• Sintiendo cada pequeño detalle de la vida con total atención.

3. Kenshô: Crecimiento a Través de la Comprensión

Kensho es la apertura que sucede cuando el aprendizaje profundo se filtra en cada célula de tu ser. En este proceso de volver, quiero seguir explorando, entendiendo y ampliando mis límites. Aprender desde la experiencia, absorber cada lección con humildad y ver la verdad tal como es.

Cómo me aseguraré de que Kensho sea mi guía:

• Acogiendo cada experiencia con una mentalidad de aprendiz constante.
• Preguntándome siempre «¿Qué puedo aprender de esto?» en cada situación.
• Usando cada desafío como una oportunidad para expandir mi comprensión.

Los dos pilares fundamentales de 2025

1. Paciencia: Confiar en el Proceso Sin Acelerar

Después de haber vivido en los extremos, entiendo que la paciencia es un superpoder. No se trata de esperar sin hacer nada, sino de saber que cada cosa llega a su tiempo. El dominio del ritmo interno es tan importante como la acción misma.

Cómo me aseguraré de que la paciencia sea mi guía:

• Confiando en el flujo natural de la vida sin resistencias.
• Practicando la disciplina de dar un paso a la vez, sin saltarme procesos.
• Recordando que cada instante tiene su valor y su razón de ser.

2. Realización: Encontrar Plenitud en Cada Acción

La realización no se encuentra en un destino, sino en cómo te entregas a cada instante. Aprendí que no hay nada más satisfactorio que estar presente en todo lo que hago. Desde una conversación hasta un entrenamiento, la realización radica en el nivel de presencia.

Cómo me aseguraré de que la realización sea mi guía:

• Abrazando cada tarea con intención y dedicación total.
• Encontrando gozo en los procesos y no solo en los resultados.
• Permitiéndome fluir sin expectativas fijas.

La palabra clave – Shin Jin Datsu Raku: Abandonarme en Cuerpo, Mente y Espíritu

Este concepto Zen significa soltar completamente el apego al cuerpo, la mente y el ego, entregándome por completo a cada acción y situación sin resistencia ni expectativas.

El concepto zen Shin Jin Datsu Raku, que se traduce como “soltar cuerpo y mente”, es un principio esencial para vivir con total entrega, liberándonos de las ataduras del ego, las expectativas y las resistencias internas. Es un recordatorio poderoso de que la verdadera libertad se encuentra en el desapego y en la aceptación radical de la vida tal como es.

Después de años de vivir fuera de la norma en La Gran Victoria, he descubierto que la única forma de encontrar verdadera paz y fluidez es rendirse al momento presente sin reservas. Shin Jin Datsu Raku no es una invitación a la pasividad, sino a la presencia absoluta en todo lo que hacemos, en cada acción, pensamiento y respiración. Es un compromiso de estar completamente presente, sin arrastrar el pasado ni anticipar el futuro.

Cómo practicar Shin Jin Datsu Raku en mi vida:

Rendirse al proceso

• Dejar de lado la necesidad de control. Aceptar que no siempre se tiene el timón en la vida y que soltar es una forma de avanzar con ligereza.
• Pregúntate: ¿Qué estoy reteniendo que me impide avanzar?

Desapego consciente

• Liberarse de las etiquetas, roles y expectativas autoimpuestas. Ser, sin ataduras.
• Reflexiona sobre qué etiquetas te has impuesto y si realmente te definen.

Acción sin resistencia

• Hacer sin esperar nada a cambio. Sumergirse en cada tarea, cada conversación y cada experiencia con una mente abierta.
• Vive el presente como si fuera la única realidad, porque lo es.

Presencia radical

• Cada acción es un acto de entrega: caminar, respirar, entrenar, escribir, amar.
• Practica el estar totalmente en cada experiencia, sin distracciones

Publicaciones pasadas de Mis Tres Palabras de los últimos 6 años

• Mis tres palabras para 2024
• Mis tres palabras para 2023
• Mis tres palabras para 2022
• Las tres palabras para 2021
• Mis tres palabras para 2020
• Mis tres palabras para 2019

Y ahora te toca a ti, ¿Cuáles son tus tres palabras para 2025? Comparte tu reflexión en los comentarios o en redes sociales usando el hashtag #Mis3Palabras.