Muchos de los correos y peticiones que he atendido en los últimos años, tienen un denominador común… Cómo hacer algo cuando no sabes qué hacer.
Si tu también estás ante ese dilema, puedo compartir contigo la fórmula que yo mismo aplico cuando han llegado ese tipo de situaciones en las que te preguntas cómo hacer algo cuando no sabes qué hacer…
- No pares de hacer cosas cada día.
- Experimenta y prueba con todo lo que puedas.
- Persiste en la vida, nunca bajes los brazos, aunque tengas todos los motivos del mundo para hacerlo.
- Cree en ti y en nadie más. Nunca pares de creer.
- Ten claro que nadie te va a regalar nada, todo tiene un precio.
- Obsesiónate con algo que te guste y conviértelo en tu trabajo.
- Pregúntale a otros qué podrías hacer y quédate con lo que te sirva.
- Considera robar ideas que resuenen contigo.
- Sigue, sigue, sigue y sigue. Y repite.
Nadie nos garantiza que vayamos a lograrlo. Nadie te asegura que algo de esto te ayude a saber cómo hacer algo cuando no sabes qué hacer, pero hay una cosa clara. Algo, es mejor que nada. Un paso es mejor que un paso no dado.
Hace años que sigo dando pasos, en la mayoría de las ocasiones me equivoco, pero ¿sabes? sigo dando pasos. Muchas veces no sé qué hacer cuando no se qué hacer. Estoy como tú, la diferencia quizá entre tú y yo, es que ni siquiera un viernes a las 21:14 horas, desde McDonalds en Ciudad del Cabo, dejo de hacer algo. No espero nada, es un acto instintivo, cuando sé cómo hacer algo, hago algo, cuando no sé que hacer, hago algo. Resultado, movimiento, a la larga equivalente a progreso.
Seamos honestos, llega un momento donde no sabes qué hacer, está más que claro, esa no es la clave. La clave es cómo de intuitivamente actuarás cuando estés en esa situación.
Atribución imagen: Afrika Burn.