Vivir ensimismado es algo que descubrí por primera vez en mi primera (y única, de momento) experiencia en el retiro de meditación Vipassana. Es aislarte de lo irrelevante, superficial y que carece de valor, y centrarte en lo que importa, tú.
Si te sientes intrépido, haz el siguiente ejercicio por pasos:
- Anota durante un día todas las veces que pierdes el enfoque debido a las distracciones que hay a tu alrededor mientras estás trabajando. Anótalo en algún lugar. Al lado anota también que te distrajo.
- Ahora haz lo mismo mientras no haces nada. Suponiendo que dediques al día algunos minutos a contemplar, meditar, permanecer quieto, o simplemente observar. Hazlo exactamente igual que #1.
- Repite #1 y #2 durante una semana.
- Ahora responde, ¿cuántas de esas distracciones fueron debido a algo importante? Cuando hayas terminado no necesitarás las anotaciones para darte cuenta de que el 90% de las distracciones eran irrelevantes. Es decir, eran y son impulsos inconscientes que nos hacen estar todo el rato mirando a nuestro alrededor, pendientes de que algo pueda suceder y entonces escaparse a nuestra vista o resto de sentidos.
Una vez terminamos este ejercicio te sentirás bastante frustrado. Es completamente normal, llegados a este punto pasamos la vida distraídos. Lo único que sucede es que ahora te has dado cuenta. Hay una palabra bastante denigrada en estos tiempos, me refiero a la palabra ensimismamiento. Lo cual según la RAE significa recogimiento de uno mismo en la intimidad, desentendido del mundo exterior. Se opone a alteración. Eso es justamente lo que necesitamos.
Estar ensimismado no tiene nada de malo, todo lo contrario, estás dentro de ti, contigo. Ahora, presta atención cuando esto pase.
Cómo vivir ensimismado
Primero, dirige toda tu atención, energía y cuidado a ti mismo durante un tiempo. Ignora, evita, evade, huye de cualquier mínima distracción. Aíslate de lo que te rodea por un tiempo, cuanto más impasible seas mejor. Abstráete de cualquier irrelevancia (aunque primero deberás analizar y distinguir que es algo irrelevante para ti).
Segundo, si lo logras, entonces será más simple vivir pleno y en paz y por lo tanto, será fácil darte al resto con autenticidad y valor. Por lo que rodearte de lo que de verdad importa vendrá (casi) solo.
Práctica el superhábito del ensimismamiento. Rechaza el mal hábito de mirar a todos lados buscando algo o alguien con quien hacer contacto y poder así evitar el enfrentarte a tus pensamientos, a tus emociones, y a tus sensaciones. Fíjate en tu alma, convive con todo lo que hay dentro de ti. Eso es lo único que importa, al principio.
¿Has probado alguna vez a pasar un día ensimismado? Si lo has probado, ya sabes lo que vas a encontrarte, si no lo has probado, ya tienes un nuevo reto por delante.