Oye, parece como si la productividad, los sistemas, estructuras y los esquemas destrozaran la creatividad o la serendipia, eso es lo que piensa mucha gente, y es bastante okay. La serendipia no sirve de nada si no sabes cómo llegar a ella y luego, una vez la obtienes, tienes que aprender a cómo canalizarla para que realmente tenga un valor. Es aquí donde entran los sistemas. Para poder hacer efectivo ese rush de creatividad que tienes y darle una salida coherente y productiva, necesitas sistemas que te apoyen.

Mira, amas la creatividad. Es uno de tus activos, razonablemente. Sin embargo, cuando escribes hay creatividad y producción (o creación). Haces que las cosas sucedan, porque primero te pagan por ello y segundo, es parte de tu negocio. Así que en lugar de preocuparte por la serendipia o la improvisación, mejor usa los sistemas y estructuras de trabajo, hábitos o aprendizaje de habilidades como tu guía, y entonces añade color a todo ello (creatividad, improvisación o una gran pizca de irracionalidad). Esta es la forma correcta de hacer las cosas.

En mi caso, muchas veces, rompo mis propias reglas (casi frecuentemente) cuestiono casi todo lo que hago, no inseguridad o auto-destrucción, sino buscar mejores, más eficientes y originales maneras de hacer lo que hago (mis reglas). Es cierto que hay que cuestionarse continuamente. Para avanzar hay que probar nuevas cosas… Refugiarse en el ensayo y error. Pero siempre empiezo desde un punto…. Un esquema, una estructura, un proceso, un sistema…. Si no, no tendría sentido para mí y tampoco podría expresar mi creatividad de una forma que mi audiencia pudiera comprenderla.

En lugar de preocuparte por la serendipia o la creatividad, apunta a que lo qué haces te conduzca al espacio que deseas. No pierdas de vista el objetivo, una vez conozcas cuál es.

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