Honra a tus valores

Ayer celebramos #InternetCambiaTodo Valencia, el evento fue fantástico, de principio a fin. Es genial ver cómo las cosas que haces suceden, disfrutar del resultado de la valentía e intrepidez. Es por eso que te digo: honra a tus valores.

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Disfruté como nunca con la charla de Oscar Valdelvira y Enrico Ahrens, reí con el atrevimiento de Rafa Llopis, saboreé la profesionalidad de Fátima Martínez, reflexioné con la claridad de Josef Ajram y la visión de Luis Calabuig, aprendí con Paula Guzmán, Isabel Romero, Marta Nicolás, Patricia Ratia y Ana Santos, e incluso me emocioné con la genialidad de Nando Coderch. Ni un sólo pero a ninguno de ellos. Unos tomaron más tiempo, otros menos. Unos hicieron al público disfrutar, otros menos. Otros maravillaron más, otros menos. Unos crearon más cambio, otros menos. Pero aquí lo importante: todos aportaron su mejor contribución, pasión e intento y eso es lo que cambia. Comprometidos, carismáticos, resonantes y auténticos agentes del cambio, Mapmakers.

El considerable esfuerzo de los organizadores, la Diputación de Valencia y la Dipu en la Red y principalmente de Jose Manuel Haro, acompañados por Jose Vicente y José Benedito.

Comprobé la excelencia de los colaboradores: gran calidad en el material fotográfico de Kiko Llorens (en el enlace puedes ver las fotos) y su equipo, siempre buscando un gran ángulo. Rafa Bernabeu buscando siempre el mejor plano para los vídeos, siempre presente. Entradas a tu Alcance, Salva y Gilber presentes para hacer funcionar personalmente el sistema de ticketing. Iván Rodríguez de Pirendo controlando la monitorización seguimiento y escucha de #InternetCambiaTodo en la web social. Ágora News (aquí el streaming completo) a todo gas retransmitiendo por streaming.

El comprometido trabajo de IG team por parte de Aitor y Katie.

Salí tan feliz y realizado como si hubiera cerrado el evento con mi charla.

Por qué no di la charla de cierre #InternetCambiaTodo

Cuando llegó el momento de mi intervención eran las 21:40h, se supone que debía entrar a las 21h. El público llevaba allí desde las 17h. Intenso, muy intenso.

No tenía nada pensado, no había plan B, ni vía de escape,  al menos eso parecía. Sin embargo, todo cambió cuando subía por las escaleras hacia el escenario mientras Vanessa me presentaba. Ahí lo vi claro, había que hacer algo que necesitaba ser hecho, pero que nadie podría hacer excepto yo, algo que podría no gustar, algo que podría herir sensibilidades y causar tensión y críticas. Adelante.

  • Estoy seguro de que hubiera podido dar mi charla, la audiencia estaba tan entregada que no su hubieran levantado, excepto unos pocos. Por otro lado, hubiera sido forzar demasiado un evento que estaba dejando un buen sabor de boca inmejorable.
  • Esto se hubiera alargado hasta las 22:20h. En el mejor de los casos, a las 22h mucha gente se hubiera levantado y se hubiera ido, en el peor, se hubieran quedado por compromiso. Otros tantos hubieran disfrutado igualmente.
  • Había preparado una nueva idea, era un experimento, algo que me colocaba en la línea de fuego, algo que requería el tiempo que tenía destinado para ello. Un intento con propósito sin una ejecución minuciosa y brillante, no es un intento con propósito, es sólo un intento. Ajustarme a 5-10 minutos era una idea que no estaba dispuesto a comprar.
  • El teatro cerraba las puertas a las 21:30h como habíamos acordado, el personal había hecho un esfuerzo extra al estar este día con nosotros. en el momento que cerré, literalmente nos echaron del teatro. Haberlo alargado más sólo hubiera crispado el ambiente.
  • La más importante de todas las razones. Estoy realmente feliz y completo, me siento honrado, realizado y  pleno porque la gente de mi alrededor crece. Así que decidí «intercambiar» – no sacrificar – mi oportunidad por la de otros que lo había ganado más que servidor.

Si dejas de creer en ti mismo/a, honra a tus valores y recuperarás esa confianza.

Aquello que no viste

Soy consciente que hay muchos que se quedaron con las ganas de mi intervención. La otra cara, esta era una charla que llevo mucho tiempo esperando, la idea se me ocurrió en #28diassinmapa y quizás lo más significativo, durante esta charla lanzaba un nuevo proyecto, algo en lo que si he puesto mucho esfuerzo, energía, ilusión, propósito e intención. Imagina lo que significaba para mi. Sin embargo, he vivido en mis carnes el valor humano de la amistad, precisamente el que lo cambia todo. La generosidad es uno de los mayores regalos que existen porque no tiene porque ser recíproco y además es un acto humano que cambia al que lo recibe y al que lo da.

Lo contrario sería un crimen

¿Decepción? ¿desilusión? ¿aprende la lección? la lección es la que me dieron a mi las 7 personas que dejaron 6 días de su vida, vacaciones, trabajo, familia y se gastaron una buena cantidad de dinero cada uno, para dedicarse en cuerpo y alma a mi durante 5 días en Ultraman. Esa misma gente que me ha apoyado cada día de mi vida y lo han dado todo por mi. Sí, esa misma gente. No haberlo hecho si hubiera sido una desilusión, de mi conmigo mismo.

Mi mensaje, honra a tus valores siempre.

Gracias y lo siento

Las 800 personas que allí estuvieron han tenido la explicación que merecía la circunstancia y mis más sinceras disculpas, quien lo entienda, fantástico, quien no, bueno, estoy de acuerdo con el precio que se supone que tenga que pagar porque la decisión que tome moleste a otras personas, creo que podré soportarlo. No estas aquí para complacer a nadie que no atienda a razones lógicas y que no logra ser empático con la situación.

Honra a tus valores

Si crees que hacer algo así puede desacreditar o restar algo en una persona, es que todavía no te has enterado de cómo jugar a este juego. Hacer que algo suceda en ocasiones consiste en hacer aquello que precisamente podría no funcionar, te hace vulnerable y justamente te enfrenta al vacío, descontento y crítica, pero te gratifica con generosidad y dignidad. Decir que eres tan grande como la gente que te rodea es relativamente fácil. El mérito está en honrar lo que dices con hechos y no palabras. Volvería a hacerlo.

Gracias por ayudarme a crecer.

Cuando dudes, honra a tus valores.

Photo credit: Kiko Llorens.

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15 comentarios

  1. no se puede ser más persona, más generoso, más solidario que tú y tu equipo Isra!!! lo has hecho estupendamente como si tu ponencia se hubiera realizado o incluso mejor, has creado expectativa, no has creado mapa, has hecho que sucediera .. abrazo mapamakers, siempre

    Mirka

  2. Enhorabuena a ti, a tu equipo, a todos los ponentes y todo el público. Me hubiera gustado estar allí con vosotros, me siento emocionado de leerte y haber leídos los comentarios de los asistentes en las redes. Hay que ser muy grande para hacer lo que hiciste, siempre guardas coherencia entre lo que cuentas y lo que haces, por eso cada vez te admiro más. Un abrazo, amigo!!

  3. Estaba viendo el evento por streaming y de repente dices (y explicas) que no vas a dar tu charla!! Lo primero: una sonrisa (en mi caso, cuando algo me deja flipado suelo esbozar una sonrisa). Lo segundo: con un par!! Eso es identidad!!
    Puede que ese final tenga consecuencias negativas que supongo que habrás evaluado, pero en definitiva es identidad!! Es un «yo soy así» pero de verdad, no como excusa de un mal comportamiento, como hace la mayoría de la gente hoy en día.
    Hace bastante tiempo que leo lo que escribes y he sido testigo de como has ido evolucionando en tu mensaje, en tus actos. Y creo que esa evolución se ha producido con una gran fidelidad a tu manera de pensar. Pienso que el éxito de tu mensaje, de tus actos, es tu sinceridad. Y cerrar ese evento de esa manera no fue otra cosa que una muestra más de tu sinceridad REAL!!
    Ahora, más que nunca, es cuando cobra sentido lo de «seguimos».
    Con un par!!!!!

  4. Nuestros – aparentemente – peores momentos son nuestra mejor oportunidad Dani. No fue fácil, pero merecía la pena, lo que viví allí me realizó y era una gran manera de honrarles a todos. Gracias, seguimos.

  5. Hacer que suceda significa que en ocasiones hay que hacer aquello que podría no funcionar, aquello que nadie haría, eso que podría doler y herir sensibilidades. Eso es lo que más necesita ser hecho.
    Gracias Javi, seguimos.

  6. Realmente este post me ha ayudado a comprender mucho más y mejor tu filosofía. Nunca llegaba a acabar de entender del todo lo de «hacer aquello que precisamente podría no funcionar». Ahora creo que ya lo tengo claro. Muy bueno.

  7. No estuve en la jornada ni la pude ver en streaming, me desayuné al día siguiente leyendo este post y si he tardado en contestar es porque no he podido dejar de pensar en ello. Me parece que tomaste la mejor decisión que se podía haber tomado: respetar. Respeto por los trabajadores del teatro y respeto por los espectadores cansados. Alguno podrá considerarse ofendido porque quizás fuera a verte solo a ti, pero este fue el mejor consejo, la mejor lección que pudiste ofrecer. Recuerdo que la primera vez que te vi fue en la UPV en las jornadas de marketing hará un par de años, donde vino Darth Vader invitado. Llegaste al escenario apurando tu tiempo, yo miraba mi reloj y me deseperaba, sacaste tus cosas de la mochila y pensé (no te ofendas) «otra estrellita capulla impuntual con applefilia que ni siquiera sabe conectarse al wifi…» .Estuve a punto de levantarme e irme, por mucho que la organización explicaba pidiendo disculpas que el sistema fallaba y todo eso. Al final se solucionó y me cautivaste. Me gustó lo que decías y antes de acabar ya te seguía en twitter, incluso te tuiteé la enhorabuena. Desde entonces estoy suscrita a tu blog y cada mañana leo lo que cuentas y es inspirador. Hace cuatro días cuando leí lo que sucedió me pareció fantástico, te doy la enhorabuena. Los tiempos han de cumplirse, es difícil, en ocasiones hay contratiempos ajenos a los propios participantes, pero es obligación de todos y cada uno de ellos poner de su parte para lograr conseguir ese fin: cumplir los tiempos. Hay que saber jugar en equipo, y nadie debe robar tiempo a los demás, no hablo de este caso en concreto pues reitero que no lo vi sino de otros casos en los que yo he participado como ponente y me he desesperado viendo como los oradores no respetaban los tiempos marcados. Es frustrante para los que nos esforzamos en cuadrar los minutos exactos y estamos continuamente mirando el reloj que otros salgan y hablen y expongan sin ningún tipo de respeto, ni a los compañeros ni al público. Por ello tu actitud te honra y debería ser ejemplo para cualquiera que participe en conferencias colectivas no importa cual sea el campo: entendamos que colectivo es entre todos y la meta final no son tus quince minutos ni pretendas estirarlos, la meta final es el público, gracias a él el orador existe y debemos cuidarlo, tanto ofreciendo buenos contenidos como respetando los tiempos marcados. Si no simplemente se levantarán y se irán o peor aún: pensarán que somos unos malditos presuntuosos desconsiderados. Y eso es lo peor que nos puede pasar.

  8. Hola Patricia. Me alegro que esto resonara y provocara algo en ti. De verdad. Es fácil dejarte llevar por el ego y la emoción del momento, eso se hace a menudo. Lo difícil es hacer lo que podría no funcionar, cada vez más habitualmente es lo que necesitamos.
    Recuerdo aquella vez en la UPV, realmente fue un mal trago. Debí haber comenzado antes, también por respeto. También te digo una cosa, sigo manteniendo y librando mi peor batalla cuando trabajo como speaker, respetar los tiempos. Es algo en lo que trabajo por mejor, mi punto débil. Supongo que en esta ocasión trabajé por adelantado en el tiempo.
    Hacer lo que hacemos es una responsabilidad, más allá de motivar, ayudar, inspirar a las personas, es conectar en todos los sentidos.

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