Dado que ahora pasas las 24 horas en casa, y salvo que vivas en Reino Unido o te saltes unas cuantas leyes, deberías pensar en cómo implantar la Ultraproductividad en casa. ¿Por qué? Porque vas a tener que pasar por esta situación durante un tiempo (practica la visualización negativa)
Así que para empezar, aquí hay una lista desordenada de pequeñas acciones que puedes llevar a cabo para implantar la Ultraproductividad en casa, para no dejar de hacer el trabajo que importa mientras vives lo mejor que puedas:
Optimiza tu tiempo
Diversifica el tiempo entre: personal (para tu crecimiento), profesional (para avanzar de alguna manera en tu trabajo), familiar (con tu familia), descanso. Lo ideal aquí sería una fórmula equilibrada del 100% del día. Hay otros matices como por ejemplo si como yo, vives solo/a, entonces ese tiempo en familia lo reparto entre personal, profesional y descanso.
Potencia tu tiempo
Haz que el tiempo que dedicas a lo personal y a lo familiar, en medida de lo posible, esté equilibradamente repartido entre actividad física (deporte – alimentación óptima), intelectual (práctica: leer con propósito, aprender habilidades o destrezas, adquirir hábitos), espiritual (prácticas: meditar – quietud), y emocional (prácticas: aceptación, rendición, vulnerabilidad o amor). Esto logrará que crees un rendimiento óptimo en cada, y sí lo haces en familia, cuando ese clima se respira, se crea una atmósfera realmente positiva.
Ocio burdo al palco
Restringe el ocio no enriquecedor a 1h máximo al día. Si fuese tú lo eliminaría, pero no lo soy.
Alimentación óptima
Identifica lo que comes, cuantas veces te alimentas, y por qué lo haces. Podrías estar pagando el ansia, frustración y estrés con la comida. Mala elección. En lugar de eso, cómprate un saco y págalo con él. Si tienes duda para llevar la alimentación que necesitas para estar positivo, optimista y lleno de energía, contacta con Lou Mateos.
Teletrabajo
Realiza microreuniones con tu equipo (o pídeselo a tu jefe), una al empezar el día y otra al acabar, no más de 10min, para que estéis todos situados sobre las prioridades que importan, de forma retrospectiva y prospectiva.
Gestión de equipos
No te vuelvas loco/a comprando software para gestión de proyectos, lo importante no es asignar tareas y cumplirlas, sino que el equipo esté alineado mental y emocionalmente.
Trabajo importante
¿Qué tareas son ahora de vida o muerte en tu negocio, trabajo o empresa? Esas van primero, al despertar. Luego, ¿que se te ocurre que podrías hacer para convertir esta situación en una oportunidad? Porque te aseguro, que una vez tu trabajo decisivo esté hecho, puedes aprovechar para investigar nuevas estrategias de negocio, captación, retención y lealtad.
Mañanas
No cometas el error de levantarte tarde, haz justo lo contrario, despierta una hora antes de lo normal. O dos. Y aprovecha para crear o perfilar o adaptar tu mañana épica.
Mantra
Es en estos días cuando esta pregunta debería ser una “oración” que repitas varias veces al día “¿Cuál es el regalo que esté confinamiento me está brindando y yo no estoy viendo?”
Deporte óptimo
Haz deporte, los profesionales como Manuel Castro recomiendan entre 30-45 minutos el día, y descansar dos o tres días seguidos.
Avanza ahora
Aprovecha para avanzar en todos los proyectos que antes tenías encallados. Pueden ser personales (cocinar, cuidar más de tus hijos, escribir, tocar un instrumento), profesionales (aprender código, diseñar plan de expansión, buscar nuevas oportunidades laborales o lanzar tu marca).
Stop a movimientos distrayentes
Limita las horas de Internet y de smartphone. Y limita todo lo que pueda restarte lo más mínimo.
Evita las horrendas tendencias en las que todo el mundo está cayendo en las redes sociales, tipo “nómino a xxxxxx, a que le de diez toques a una bola de papel”, y similares.
Comprueba y lee un 80% menos que antes las redes sociales y los medios informativos. Reduce las soluciones digitales.
Infórmate solo de fuentes creíbles y ecuánimes – ejemplo: TED.
Practica lo micro
Toma microdecisiones que no afecten a tan largo plazo, no sabes que va a pasar entonces. Practica la quietud en pequeños momentos, cuando te levantes, antes de ir a dormir, después de tu jornada de trabajo – busca al menos 5 o 6 momentos de quietud de dos a cuatro minutos. Haz lo mismo con las micromeditaciones, pueden ser de dos a cinco minutos – entre seis y siete al día, verás cómo vives de forma diferente y enfocas muy distinto cada día y lo que pueda deparar. Establece microbjetivos, nada pretenciosos, recuerda que lo que quieres es moverte mucho, para hacerlo, no hay nada como dar pequeños pasos – cuando acabe todo esto tu progreso no será comparable a nadie.
Puedes verlo como un confinamiento o una oportunidad para implantar la Ultraproductividad en casa, todo es cuestión de percepción y enfoque.
Atribución imagen: GoTechDaily / Employment Hero.