Creo que hay un serio problema con lo que conocemos como mejores prácticas… ¿Cuántas veces has sido capaz de apartarte de tu trabajo como profesional (del marketing en este caso) para evaluar si estás dando tu máximo? ¿Crees que podrías descubrir si lo estás dando o no?
Creo que todos podemos encontrar una brecha. Es una oportunidad entre el trabajo que aspiramos hacer… Y el trabajo que en realidad hacemos; los resultados que nos gustaría ver… Y los resultados que en realidad obtenemos. Las interacciones que nos gustaría mantener… Y las que en realidad mantenemos. Es algo frustrante, especialmente cuando sabes lo duro que estás trabajando.
Entonces, ¿cómo hacer tu mejor trabajo ?
Creo que podemos encontrar la respuesta solo si examinamos el comportamiento usual cuando tratamos de cerrar esa brecha. Porque ¿qué es lo que hacemos cuando necesitamos mejores resultados? Buscamos lo que se denomina como mejores prácticas en marketing, por ejemplo.
Fíjate en este gráfico, es una representación dl método «las capas del marketing«, para mí, desde la experiencia, la mejor forma posible de hacer marketing. Aún así, aun siendo probado, no es una mejor práctica que aplica a todo el mundo.
Puede parecer que tenga sentido al principio. Pensamos que las mejores prácticas en marketing nos ayudarán en nuestro trabajo y resultados.
Esto es lo que sucede:
Hipótesis:
Empiezas haciendo tu trabajo. Te das cuenta de que es difícil. Encuentras las mejores prácticas en marketing. Y entonces haces tu mejor trabajo.
Realidad:
Haces tu trabajo, te das cuenta de que es difícil. Encuentras las mejores prácticas (en lo que sea). Y entonces casi lo logras. Vuelves a buscar mejores prácticas, y vuelves a encontrarlas. Entonces nada. Repites proceso. Resultado, tampoco. Repites de nuevo. Resultado, cero. Vuelves a repetir… Resultado, desesperación.
No es sobre las mejores prácticas, sino sobre «tus» mejores prácticas
No dejamos de descubrir nuevas prácticas. Las últimas tendencias, seguir al último gurú de turno, las “nuevas reglas del marketing digital”, etc… Hay muchos que siguen esperando más recursos, otros que reza porque alguien les facilite las «técnicas definitivas”. Sin embargo, el problema no es el volumen de información: es cómo utilizamos esa información. El problema principal es cómo tomamos decisiones como profesionales – del marketing o marketing digital, o de cualquier industria.
A veces, tomamos decisiones basados en la práctica que mejor se integra en nuestra forma de ver el mundo. Este es el camino hacia la sabiduría convencional. Cuidado, solo porque sea el enfoque más común, no significa que sea el mejor enfoque para el negocio, para nuestra profesión o para nosotros. Algo que la industria discográfica, automovilística o de la publicidad impresa han aprendido de la forma más dolorosa posible.
Extra: mañana se pone en venta mi nuevo libro, Marketing Digital para Dummies. Nadie puede asegurar que encuentres las mejores prácticas, ni el mejor conocimiento, o las estrategias más efectivas que existen. Pero si podemos asegurar que encontrarás toda la experiencia sobre marketing digital (y marketin en esencia) que cinco profesionales hemos podido volcar en 336 páginas.