Tu negocio tiene un núcleo, un objetivo, un desafío y un valor. Hay una cosa que transformaría tu proyecto, un factor que cambiará radicalmente el resultado, un obstáculo que será más duro que el resto. ¿Qué es duro? ¿Qué respondería una atención muy muy por encima de la media? Ese es el núcleo que buscas.
Desde el el núcleo del proyecto hacia dentro
Llegar desde el punto cero al punto cien requiere hacer ventas perspicaces. Cumplir compromisos que van más allá de los del resto. Fracasar útilmente. Y en último lugar, hacer que las cosas sucedan.
Durante el camino, hay responsabilidades de apoyo y coordinación con las que necesitas lidiar. Tácticas que puedes realizar para que los objetivos sean más fáciles y rápidos de alcanzar.
Tu ecommerce podría empezar a generar confianza y leads y al final ayudarte a vender más productos.
Una comunidad online despierta podría darte la oportunidad de contar una historia que potencia el guest experience.
Una juerga vibrante puede crear un valor que haga que un determinado micronicho se sienta brutalmente atendido.
Pienso que no son actividades triviales. De hecho, son parte de lo que hoy significa el marketing. Sin embargo…
Si todo aquello que haces no te permite encontrar un mecanismo para evitar el trabajo complejo de alcanzar tus metas. Ejemplo: no puedo desarrollar el mini plan táctico e informe de resultados. Estoy muy ocupado subiendo fotos de la parranda de anoche o enviando tweets sobre temas oportunistas. Si eso sucede, con todos mis respetos, no estás haciendo el trabajo por el cual ser pagado, estás escondiéndote del trabajo que importa. Es como criar tortugas, estos pequeños seres están vivos, y van a necesitar muchos esfuerzos por tu parte.
Hay un punto delicado
Una vez que tu actividad principal empieza a tomar tracción, llevará a ineficacias, crisis e incluso desesperación (devolver la llamada urgente o estar pendiente del correo electrónico). Hasta sentimientos de abandono (no estás en las redes sociales), u ofertas irresistibles para llegar a tu gerente. Siempre habrá un sentimiento de lentitud, oportunidades perdidas y fechas límites. Principalmente, porque son movimientos humanos, no compra programática o un ERP.
Las elecciones
1. Encontrar una manera de que tu meta esté completamente alineada con las tácticas que utilizarás para alcanzarla. Lo que es bueno para tus clientes, lo es para tus empleados, y viceversa.
2. Ahora que la estrategia funciona, bien, es momento de diseñar sistemas para que no acabemos mareados con detalles que no están ligados a resultados importantes.
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