Un compromiso honesto vale más que cualquier otra acción, ¿por qué entonces fallamos a no comprometernos más? La productividad en el trabajo y en la vida, va también sobre promesas. Es un gran turbo.
Productividad en el trabajo y en la vida
En ocasiones parece que estamos pidiendo permiso. En lugar de eso, lo que deberíamos hacer es mantener una conversación honesta que negocie el compromiso. Esta estrategia creará una cultura de responsabilidad, autodisciplina y confianza. Todo lo que necesitamos para ser productivos en el trabajo y en la vida.
He diseñado un sistema para alcanzar esta meta:
1. (Establece) pocos pero mejores compromisos
El primer paso es entender que necesitamos o que necesita nuestro equipo. Si planificas cambios de cualquier tamaño o enfoque, necesitas entender que los demás quieren saber si ese cambio durará. Es un paso simple para comprometerte por lo más valioso para ellos.
2. No pierdas de vista los compromisos clave
esto no es muy complicado. Simplemente crea una lista de las personas que depende de tu trabajo para que ellos puedan avanzar. Entonces, lista tu promesa a cada una de esas personas. Por ejemplo: «Enviaré los informes directos con los recursos que ellos necesitan». Y, debajo, la promesa específica: «contrataré nuevos consultores antes de que llegue el próximo mes».
3. Pide compromiso
Las promesas funcionan de dos maneras diferentes, pero tenemos que pedir lo que queremos. Podría ayudar – y mucho, una afirmación de lo que solicitamos y una sugerencia de cómo podríamos avanzar. Ojo, las necesidades deberían ser explicadas de forma que se ofrezca a la propia persona, o a la otra parte, una elección para aceptar ese compromiso. No se puede obligar a la promesa, de ser así, diríamos sí, o dirían sí, y al poco tiempo se dejaría a un lado.
4. Crea conexiones entre compromisos
Una forma de que las personas se comprometan y logren lo que necesitan lograr, la productividad en el trabajo y en la vida, es facilitar una colaboración directa con otras personas. Una técnica que yo utilizo en IG es comunicar cómo cada persona encaja en la contribución oficial a un proyecto o cliente, y agencia. Esto siempre aumenta el compromiso y la motivación para seguir avanzando.
5. El proceso trunca los esfuerzos heroicos
Si confías demasiado en actos heroicos estás destinado al fracaso. En lugar de eso, crea procesos que faciliten el camino a conseguir las metas. Si inviertes en suavizar las grandes caídas, podrás crear más compromiso y producir mejores resultados.
6. Consistencia
Para poder respirar compromiso en un equipo de trabajo, es importante que todo el mundo esté alineado. La consistencia es cómo alguien decide si eres sincero y pueden confiar en ti o no. Si siempre haces lo que dices, si eres claro y único en tu mensaje principal y si evitas las contradicciones, llegaremos al compromiso que facilitará la productividad en el trabajo y en la vida.
Cuando prestamos más atención a comprometernos y cumplir esos compromisos, entonces generamos trascendencia. Un principio de la ultraproductividad. La propia trascendencia nos da el coraje de decir «sí» o «no». Esas decisiones son promesas que se mantienen en el tiempo, lo cual alivia el trabajo emocional y potencia el impacto en lo que haces.
Atribución imagen: Jaco Ferreira / Chema Solís.