Desde que he llegado a Australia no he parado de recibir sonrisas de extraños, ahora en Tazmania también, incluso más, mucho humor, mucha alegría y mucho positivismo, tanto que acaba cargándote de energía positiva. Definitivamente, sonreír con propósito cambia el juego, esto es algo que comprobé en el experimento 31 días sonriendo a todo el mundo. Cambia el juego porque cambia la interacción, con los demás y contigo mismo. No importa si es un cliente, un troll / cínico / escéptico, familiar, subordinado, superior, pareja o desconocido. Altera primero, la señal que envías a otra persona, ya sea primera impresión, segunda o última. Y segundo, altera el mensaje que otros reciben de ti. En los 31 días de experimento, no tuve más que un 6% de respuestas negativas, 15% de respuestas neutrales y el resto, un 79%, fueron respuestas mucho más positivas que si no hubiera sonreído.
Las respuestas positivas que obtuve vinieron de todos los flancos, desde reuniones (la mayoría online) con equipo, clientes y proveedores, hasta cruzarme con completos deconocidos en la calle, en un comercio, cine o un medio de transporte.
El superhábito de sonreír con propósito
Cuando el experimento terminó, quise no perder esa «mejora», pensé que la mejor forma de hacerlo era desde dentro. Es así como se cambian las cosas importantes. Entonces decidí condensar todo lo aprendido en crear un microhábito que pudiera ejecutar todos los días sin abrumarme o que supusiera una gran carga. Esto fue lo que hice, crear un microsistema:
- Despertar, abrir los ojos (todavía en la cama)
- Pensar en una cosa que me produzca plenitud, alegría y me dibuje una buena sonrisa.
- Prolongar ese pensamiento / sensación durante aproximadamente un minuto.
- Respirar hondo, exhalar profundamente, y saltar a lo siguiente que venga.
Empecé hace ya unos meses. El resultado, para mí, es más positivo que antes, porque me hace que me acuerde lo importante que es sonreír. Sea lo que sea lo que venga después, lo afronto con una sonrisa. Luego, con consciencia, trato de llevar esa sonrisa siempre que pueda. En efecto, cuando sonríes porque sí, cuando estás alegre en lugar de enfadado, cuando cambias tu humor cuando no tenías por qué hacerlo. En esos momentos abres puertas que otros no abren, y a la larga, te tomas los problemas o sucesos negativos con mucha menos trascendencia. Esencial cuando quieres ser ultraproductivo/a.
Lo sé, lo sé, algunos ya hacen esto cada día. Esto es para los que somos más «pensadores» y menos «sentidores». No obstante, si ya lo practicas, quizá podrías mejorarlo, como por ejemplo en los momentos que pierdes el temperamento.
Disrupt Everything web series #14
De esto, y algo más, va el episodio #14 de las series de vídeos sobre cómo reinventarte a ti mismo y cambiar lo que importa ahí afuera. Sobre el superhábito (versión micro) de sonreír cada mañana e impregnar más energía a tu día.
Hoy en día, el microhábito de sonreír co propósito forma parte del algoritmo de alto rendimiento que llevo años diseñando y mejorando.