Todo el mundo, sin excepción, se esfuerza en combatir la voz negativa que hay en nuestra mente.
Yo también tenía, y tengo esa voz negativa y he tratado, trato y trataré de vencerla. Sucede casi siempre en momentos decisivos, antes de que montara mi primer negocio, IG, en 2010, o antes de lanzar Stand OUT Program, o antes de escribir y publicar mi primer libro, incluso antes de lanzar el podcast y las series de vídeos. Incluso hoy mismo, cuando estoy ante varios dilemas personales, me vi a mi mismo luchando contra mi crítico interno, esa voz negativa dentro de mi mente.
La voz negativa que habita en mí
No importa si no tienes recursos o si los tienes. Si eres hombre, o mujer. Emprendedor u operario. Todos tenemos que lidiar con esa voz negativa.
A estas alturas no tengo por qué mentir a nadie, la mayor parte de mi vida, sobre todo la más consciente, la reciente, está controlada por mi mentalidad autoexigente, negativa, indigna y en ocasiones hasta autodestructiva. No recuerdo el número de veces que me he quedado nadando en un mar de inseguridad. Las veces que he sido arrollado por una avalancha de indignidad. Casi nunca es nada suficiente para mí, no me merezco. En ocasiones. Hablo en presente porque todos los motivadores y todas las historias de superación que nos cuentan es algo que has dejado atrás. Nunca se cuentan cuando están en medio de la tormenta. No va a ser mi caso, me he dado cuenta de que, desde hace años, vivo cómodo en medio de la tormenta.
Convivo con mi lado oscuro, que tenga consciencia, por lo menos desde 2008. Somos amigos, no podemos vivir en uno sin el otro, lo tenemos claro. Tantos grandes momentos y tantas catástrofes. Esa voz insistente en mi cabeza diciéndome que no soy lo suficientemente bueno. No sé cómo se las apaña pero siempre trata de sabotear mi mejor trabajo, mis logros personales o profesionales, incluso relaciones con equipo, familiares o amorosas.
Afortunadamente ya llevamos muchos años coexistiendo, hemos ido creciendo ambos, juntos. De no ser por eso, por la gran y profunda relación que hemos desarrollado y la empatía que sentimos el uno por el otro, creo que habría caído en la butaca de la ansiedad hace tiempo. Si es cierto que mi trabajo pendiente es poder exteriorizarlo más con la gente está a mi alrededor. No lo hago lo suficiente.
Lo que cuento puede parecer triste, pero no lo es.
La voz negativa es una oportunidad
El problema es que en ocasiones no sabemos cómo utilizar a nuestro favor ese lado más oscuro. Solía pensar y esforzarme en silenciar esa voz, pero primero, es imposible, y Segundo, esa voz tiene un propósito
No la silencies. No está para eso.
Necesitas eliminar el impacto negativo que ejerce en tu vida. Y eso lo puedes conseguir de cuatro formas:
- Reconociendo que esa voz no es objetiva.
- Reenfocando la situación.
- Entrenar la mente negativa para que sirva como motivación.
- Identificarlo como un momento donde tienes que sobresalir en lugar de huir.
¿Puedes vivir en paz, y pleno, a pesar de tener una voz negativa que nunca calla? ¿A caso piensas que la gente que vive en paz y lleva una vida plena no posee ese lado oscuro? Eso es lo que les diferencia, aceptarlo y utilizarlo a su favor.
Mi parte oscura, la voz negativa y yo mismo te incitamos a que empieces a andar el camino.